Arquitectos de Qatar planean construir un estadio de fútbol muy particular, similar a una vagina, que será utilizado como sede del Mundial a disputarse en ese país árabe en 2022.
La construcción estará finalizada para 2018 y podrá albergar a 40 mil espectadores sentados en sus cómodas butacas. Además será parcialmente techado debido a la furia con la que el sol ilumina esa región.
Si bien los diseñadores de la obra insisten en que su diseño fue inspirado en las típicas embarcaciones de la zona, denominadas "dhows", el estadio comenzó a ganar fama debido a su similitud con un órgano genital femenino gigante.
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