San Lorenzo se imponía por 1-0 y en una contra letal definió el partido a través de un terrible zurdazo de Pablo Barrientos. El Pitu le pegó desde 50 metros y la clavó en el ángulo del arco de Agustín Silva.
"Nunca hice un gol desde tan lejos, pero éste es seguro el más lindo de mi carrera. Llegó y fue con suerte también por donde entró, pero tenemos que seguir adelante porque hay mucho por jugar", destacó el chubutense.
comentar