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Inmediatamente después de haber convertido el gol que abrió el marcador ante Huracán, el delantero de La Academia participó de una desafortunada acción en la que sufrió el desgarro del ligamento colateral interno de su rodilla derecha.
La noche pintaba tranquila para Racing: amistoso con dos hinchadas, presentación del nuevo sistema lumínico en el Cilindro y triunfo parcial con gol de Lisandro López, la figura y máximo referente del equipo de Diego Cocca.
Sin embargo, pocos segundos después de la apertura del marcador, todo el estadio se paralizó cuando Licha fue a disputar una pelota en el mediocampo y se le quedó trabada la rodilla derecha, con consecuencias que, en principio, parecían graves.
El delantero hizo un movimiento poco ortodoxo y enseguida se quedó inmóvil en el piso, mientras Diego Cocca intentaba consolarlo y él se tomaba el rostro, consciente de que no se trataba de una lesión menor.
Lautaro Martínez entró para reemplazar al goleador, que fue retirado por el carrito y llevado sin escalas al vestuario. A la espera de un parte médico oficial, Racing ya perdió demasiado en el partido de este sábado.
Finalmente se confirmó que la lesión fue menor de lo que se imaginaba: desgarro del ligamento colateral interno de su rodilla derecha.
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