Un criadero ilegal de perros de la raza caniche toy fue clausurado en el barrio porteño de Liniers y cinco canes que se encontraban en jaulas en muy malas condiciones de higiene fueron enviados a un centro de recuperación.
El procedimiento se realizó en José de Paula y Rodríguez Alvez al 900, en la zona oeste de la ciudad.
La Unidad Fiscal especializada en Materia Ambiental, a cargo interinamente del fiscal Federico Villalba Díaz, comenzó a investigar a partir de denuncias recibidas de vecinos del criadero, que veían personas que salían de noche con cajas con perros.
Los investigadores ubicaron el sitio web desde donde se vendían los animales, “Mundo caniche”, y pudieron confirmar que en ese domicilio había un criadero ilegal.
El fiscal solicitó el allanamiento al criadero, que fue autorizado por el juez Carlos Aostri, titular del juzgado Penal, Contravencional y de Faltas 19. El procedimiento fue llevado a cabo por personal de la División investigaciones Delictivas y de la División Perros de la Policía de la Ciudad.
El fiscal ordenó secuestrar a los perros para enviarlos a un centro de recuperación ONG Prodea de Elba Tirbuzi.
Al ser revisados los animales, el veterinario advirtió que cuatro de los perros ladraban con una voz ronca, lo que podría indicar que le fueron cortadas las cuerdas vocales.
Esta es una práctica ilegal de los criaderos clandestinos para evitar que los animales llamen la atención de los vecinos.
La Fiscalía imputó a los responsables del criadero por actos de crueldad artículo 3 inciso 7 de la Ley 14346.
Se secuestraron todas las jaulas y elementos vinculados a la cría, al tiempo que se dispuso la clausura judicial del sector de la vivienda que funcionaba como criadero ilegal.
En el operativo intervinieron también inspectores de la Dirección General de Fiscalización de Espacio Público, la Gerencia Operativa de Protección Animal.