La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) falló a favor de Práxedes Candelmo Correa (anteriormente conocida como Malena o Sebastián Candelmo) y señaló la inacción judicial de la Argentina en relación al "transodio, la violencia mediática y la falta de acceso de salud" que sufrió la víctima durante muchos años.
Candelmo fue víctima de un abuso sexual por parte de Héctor "Bambino" Veira en 1987, cuando era una adolescente de 13 años.
El exjugador y entrenador fue sentenciado en 1991 a 6 años de prisión por el delito de "violación consumada" y estuvo detenido 11 meses en la cárcel de Devoto.
Luego, la Corte Suprema bajó la calificación a "tentativa de violación", fijó la condena en 3 años y lo liberó luego de pagar la suma de 110.000 dólares como indemnización para la víctima.
Candelmo, que desde el 2015 es enfermera del Hospital Argerich, nunca se sintió satisfecha con lo que hizo la Justicia en el caso y reclamó la intervención de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que falló a su favor.
En esta causa también están involucrados Telefé, Matías Martin y el productor Gastón Portal, acusados de "calumnias e injurias" por burlarse del caso, en 2004, durante la emisión del programa "Aunque usted no lo viera".
“Fueron muchos conductores en realidad, los que me maltrataron. Hice muchas denuncias pero ninguna prosperó porque los jueces se agarraban de la libertad de expresión", declaró Candelmo.
"Mi papá me ayudó en las instancias previas, la denuncia de Telefé y Gastón Portal todavía está en primera instancia pero La Comisión Interamericana de DDHH se expide sobre el retraso que se hace con mis denuncias. Le piden a la justicia argentina que actúen rápido contra Telefé, contra Matías Martin y con Gastón Portal", agregó.
La joven explicó que “el retraso de la Justicia general que hay en la Argentina es por la falta de respeto al género y la falta de respeto a la salud. Mandé constantes mensajes. Tuve que seguir mandando pruebas y me seguían sucediendo cosas y las tenía fundamentadas. A la Comisión Interamericana le interesa escuchar el testimonio de lo que pasó, no me pidieron pruebas legales, me quisieron escuchar. Fui perseverante y no dejé de ser yo. Me expresaba con mi dolor y de esa manera me fui curando a mí misma".