A través del documento, el Santo Padre solicitó un sepulcro "sencillo y sin decoración particular". También expresó otras voluntades en el texto fechado en 2022.
Antes de su muerte, el Papa Francisco dejó escrito un testamento en el que manifestó su deseo de ser enterrado en la Basílica de Santa María la Mayor, en Roma. Además, pidió que su sepulcro esté "en la tierra", que sea "sencillo, sin decoración particular" y con la única inscripción de su nombre papal en latín: "Franciscus".
"Sintiendo que se acerca el fin de mi vida terrenal y con viva esperanza en la Vida Eterna, deseo expresar mi voluntad sólo respecto al lugar de mi sepultura", señaló el Papa en el documento, difundido este lunes por la Oficina de Prensa de la Santa Sede, tras la muerte de Francisco a causa de un ictus.
Según expresó Bergoglio, siempre ha "confiado" su vida y su ministerio sacerdotal y episcopal "a la Madre de Nuestro Señor, María Santísima". Por eso, solicitó que sus restos mortales "descansen en espera del día de la resurrección en la Basílica Papal de Santa María la Mayor".
"Deseo que mi último viaje terrenal concluya precisamente en este antiguo santuario mariano donde fui a orar al inicio y al final de cada Viaje Apostólico para confiar mis intenciones a la Madre Inmaculada y agradecerle su cuidado dócil y maternal", subrayó.
El testamento del Santo Padre fue fechado el 29 de junio de 2022 en Santa Marta. Allí también detalló que "el sepulcro debe estar en la tierra; sencillo, sin decoración particular y con la única inscripción: Franciscus".
En cuanto a los gastos para la preparación de su entierro, explicó que "serán cubiertos por la suma del benefactor" que dispuso trasladar a la Basílica Papal de Santa María la Mayor y de la que dijo haber dado las "instrucciones oportunas a Mons. Rolandas Makrickas, Comisionado Extraordinario del Capítulo Liberiano".
"Que el Señor les dé la recompensa merecida a quienes me amaron y seguirán orando por mí. El sufrimiento que se hizo presente en la última parte de mi vida fue ofrecido al Señor por la paz en el mundo y la fraternidad entre los pueblos", concluyó.
El testamento fue difundido poco después de que el Vaticano confirmara que Francisco murió como consecuencia de un colapso cardiovascular y apoplejía cerebral.
Las causas del deceso fueron comprobadas mediante un electrocardiograma tanatológico realizado por el profesor Andrea Arcangeli, director de la Dirección de Sanidad e Higiene del Estado de la Ciudad del Vaticano.
En este sentido, la Oficina de Prensa de la Santa Sede indicó que el exarzobispo de Buenos Aires presentaba antecedentes de insuficiencia respiratoria aguda en neumonía bilateral multimicrobiana, bronquiectasias múltiples, hipertensión y diabetes de tipo II.