El dato fue publicado por el Observatorio 'Adriana Marisel Zambrano'. Por estos hechos, 276 hijos quedaron sin madre. Las principales características de los femicidios.
En los primeros diez meses de este año se reportaron 243 hechos de víctimas de violencia de género, que derivaron en 217 femicidios, cinco transtravesticidios, tres lesbicidios y 18 crímenes de varones vinculados a las mujeres asesinadas. Los datos surgen del relevamiento del Observatorio "Adriana Marisel Zambrano", de la asociación civil La Casa del Encuentro, donde, además, se destacó que 276 hijas /hijos quedaron sin madre y que el 52% de ellos son niños menores de edad.
Este informe, que abarca del 1º de enero al último 31 de octubre, precisó que el 54% de los agresores eran parejas o ex parejas (con un total de 112 casos) y luego se identificaron a 26 conocidos/vecinos como femicidas, en 12 hechos participaron hijos/hijastros, en seis padres/padrastros, en 17 otros familiares y en 42 no existía un vínculo aparente. "Como cada informe mensual lo demuestra, el lugar más inseguro para una mujer en situación de violencia continúa siendo su vivienda o la vivienda compartida con el agresor", señalaron desde La Casa del Encuentro.
En el 63% de los casos, ellas fueron asesinadas en su hogar, ya que se registraron 80 hechos de ese tipo y 54 en la vivienda compartida. Otros siete en el domicilio del femicida, 39 en la vía pública (calles, rutas o descampados), 10 en ríos, canales o arroyos, 12 en viviendas ajenas, 11 en el interior de vehículos, cinco en lugares de trabajo y uno en un hotel.
En relación a la modalidad con que se cometieron los femicidios, 62 de las mujeres fueron asesinadas a balazos, 58 con armas blancas, 40 estranguladas/ahorcadas, 31 por traumatismos provocados por golpes, 12 de ellas quemadas, tres descuartizadas, una ahogada y en 18 episodios se carece de datos confirmados por los investigadores.
Sobre la edad de las víctimas, la mayoría tenía entre 31 y 50 años -con 90 casos-, 61 eran jóvenes (19/30), 31 estaban en la franja etaria de 51 a 65 años de edad, 23 eran adultas mayores (66 a 90), 11 adolescentes (de 13 a 18) y 5 niñas de hasta los 12 años.
Como "información adicional", el relevamiento señaló que 31 de las víctimas habían realizado denuncias previas y a sólo 10 de los femicidas se le había dictado una medida cautelar de restricción de acercamiento. Además, 11 de los asesinos pertenecen o fueron miembros de fuerzas de seguridad, habiendo utilizado armas reglamentarias para cometer los crímenes.
Mientras que 22 de las mujeres presentaban indicios de abuso sexual en los ataques, cinco de ellas se encontraban en presunción de prostitución o trata de personas y tres estaban embarazadas. Otro dato que va incrementándose en cada uno de los reportes, dio cuenta que 16 de los crímenes de mujeres ocurrieron en contexto de narcocriminalidad, siendo víctimas inocentes de enfrentamientos entre bandas.
Y si bien los femicidios abarcan el territorio nacional, en términos absolutos Buenos Aires sigue siendo la provincia con más casos (88), seguida por Santa Fe (22), Córdoba (15) y Chaco (13). Luego aparecen Mendoza, Salta y Tucumán con nueve, Santiago del Estero con ocho, Misiones y Entre Ríos con siete, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y Corrientes con seis, San Luis con cinco y Jujuy con cuatro.
Ya no quedan provincias del país en que no se hayan registrados femicidios en lo que va del 2024, ya que el resto de los hechos tuvieron lugar en Neuquén (tres) San Juan, Chubut, La Rioja, Santa Cruz y Río Negro (dos) y Tierra del Fuego, La Pampa, Formosa y 1 Catamarca (uno).
"Estas cifras no son sólo números, detrás de cada mujer asesinada hay hijos e hijas, familias y amistades que no vemos. La destrucción que existe detrás de cada femicidio es total y aún más cuando nos encontramos ante un Estado que retrocede en sus obligaciones", denunciaron en el documento difundido en los últimos días.
Para La Casa del Encuentro, "en diez meses se eliminaron los organismos rectores en políticas de género y se desfinanciaron los pocos programas que sobrevivieron. Para el futuro mediato, no hay desde el Ejecutivo ningún anticipo de medidas, políticas públicas y programas que prevengan y trabajen para erradicar la violencia de género, lo que constituye un ejemplo concreto de lo que llamamos Violencia Institucional".