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DIARIO POPULAR visitó en Cayastá a Juan Carlos, el hombre que prestó los caballos que ayudaron a atrapar a Martín Lanatta y quien se refirió a los dos millones de pesos ofrecidos por el gobierno bonaerense. "Nunca esperé algo a cambio, pero si viene, viene...", dijo.
La triple fuga dejó varios actores de reparto desde que comenzó hace más 14 días. Juan Carlos, "El Baqueano" se convirtió en uno de ellos al prestar tres caballos para que las fuerzas de seguridad puedan recapturar a Martín Lanatta en Cayastá.
Días antes de este hecho, el gobierno bonaerense había ofrecido dos millones de pesos a quien ayudara a la captura o a cambio de información sobre los fugados de General Alvear. DIARIO POPULAR habló con él y la respuesta fue tajante: "Nadie se comunicó conmigo. No me llamó nadie".
-¿Alguien se acercó a usted para hablar sobre este tema?
-Han dicho muchas cosas sobre eso, pero la verdad que nadie me habló. No me llamó nadie de ningún gobierno. Tampoco estoy esperando que lo hagan.
-¿Y con sus familiares? ¿Se comunicaron con alguien de su entorno?
-No, tampoco. Nadie me vino a decir nada, pero también es verdad que se lo merece otro hombre que ayudó antes que yo. El hombre al que el señor Lanatta le pidió agua fue muy valiente. Él fue el que dio aviso. Mis caballos estaban ahí, junto a mi carro y acá la Policía sabe que siempre están a disposición.
-¿En serio no cree que merece la recompensa?
-Y... me lo han dicho mucho. Si viene, viene. Y la voy a aceptar porque sería una falta de respeto decir que no. Mucha gente inteligente me ha dicho que la merezco... y ya no sé que pensar.
-Nunca pensó en el dinero...
-Yo sólo cumplí con un acto de bien y traté de ayudar a los policías en este caso, porque son criminales peligrosos. Nunca esperé algo a cambio.
-¿Cree que sin su ayuda esto no hubiera sido posible?
-No sé, es imposible pensar eso. Pero es una zona difícil. Eso hay que reconocerlo.
-¿Alguien se acercó a usted para hablar sobre este tema?
-Han dicho muchas cosas sobre eso, pero la verdad que nadie me habló. No me llamó nadie de ningún gobierno. Tampoco estoy esperando que lo hagan.
-¿Y con sus familiares? ¿Se comunicaron con alguien de su entorno?
-No, tampoco. Nadie me vino a decir nada, pero también es verdad que se lo merece otro hombre que ayudó antes que yo. El hombre al que el señor Lanatta le pidió agua fue muy valiente. Él fue el que dio aviso. Mis caballos estaban ahí, junto a mi carro y acá la Policía sabe que siempre están a disposición.
-¿En serio no cree que merece la recompensa?
-Y... me lo han dicho mucho. Si viene, viene. Y la voy a aceptar porque sería una falta de respeto decir que no. Mucha gente inteligente me ha dicho que la merezco... y ya no sé que pensar.
-Nunca pensó en el dinero...
-Yo sólo cumplí con un acto de bien y traté de ayudar a los policías en este caso, porque son criminales peligrosos. Nunca esperé algo a cambio.
-¿Cree que sin su ayuda esto no hubiera sido posible?
-No sé, es imposible pensar eso. Pero es una zona difícil. Eso hay que reconocerlo.
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