Jacinta Martínez Ranceze, o más conocida por la familia y amigos como "Jachu", es una joven deportista de 20 años con Síndrome de Down que ha llegado lejos tanto a nivel nacional como internacional luego de convertirse en la campeona mundial de nado sincronizado en varias oportunidades. Jachu hizo de la natación su cable a tierra, su medio, y algo que comenzó como un pasatiempo, se convirtió en su día a día y en un cuarto lleno de medallas, reconocimientos y premios. Hoy, la campeona del Open argentino en 2018 y 2019, abre a las 14.30 el Campeonato Sudamericano de Natación en el Parque Olímpico.
“De pequeña mi mamá, que es muy buena conmigo, me llevo a hacer natación con un profesor que se llamaba Ulises y yo era muy buena, muy acuática", empezó contando Jachu, en conversación con POPULAR al hablar de sus inicios en el mundo del nado sincronizado. "También hice baile clásico con Vicky Ocampo, y entonces entre baile y natación se forma nado sincronizado" agregó.
Su mamá, Raquel Ranceze, recordó: “A los seis meses empezó a nadar y nunca dejó de hacerlo. A parte de eso hizo baile clásico entre millones de cosas más, como equitación, pero siempre la natación seguía ahí".
En 2016 Jachu conoció a Gabriela Viglino quien la invitó a realizar esta disciplina y le enseño unas cuantas técnicas que continuó perfeccionando con Evelia Ávila, su entrenadora durante 3 años y que al día de hoy sigue perfeccionando junto a Martina Frljanic. Durante esos años logró múltiples medallas que nos fue mostrando durante la entrevista con una sonrisa de oreja a oreja que reflejaba una felicidad inexplicable. Fue campeona del Open argentino desde 2017 al 2019 llevándose los Oros, del Open Europeo de Italia de 2019 también con 2 oros (en las categorías solo técnico y solo artístico) y entre otros, se llevó 4 medallas de Plata en el Mundial de Canadá en 2018 donde participó en las categorías "sólo técnico", "solo artístico", "dúo" y "grupo".
Pero todos esos premios se deben a horas y horas de práctica y dedicación, que no se hubiesen logrado si Jacinta hubiese permitido que su discapacidad y limitaciones la frenaran. Hoy en día entrena alrededor de dos horas por día adentro del agua, sumado a las horas de preparación física y eso porque no hay campeonatos en la mira, pero como dice su mamá "ella es una atleta, una atleta con todas las letras". “Me preparo muy bien, entreno mucho, mucho, en especial antes de la presentación de mi coreografía. Me encanta entrenar, me divierte, me da adrenalina”, explicó Jachu al hablar de como se prepara para los campeonatos.
Su pasión por el agua es sin igual, y se nota cada vez que se menciona la palabra o se hace referencia a la pileta, porque sus ojos se achinan y su sonrisa se ensancha. El miedo no está en su diccionario y los límites tampoco, pero no deja de ser consciente de que es capaz o no, de lograr. "Nunca tengo miedo abajo del agua. Es mi pasión, mi parte favorita", apuntó la campeona.
"Un día estábamos en Mar del Plata y escuchó que había una carrera de aguas abiertas de 2000 metros de los que se estaban entrenando para el curso de guardavidas. Ahí me dijo: 'Yo quiero participar'. Imáginate el miedo que nos agarró a nosotros, los nervios. Pero Jachu es una persona que no se manda por que sí, ella cuando dice que puede, puede", relató Raquel recordando una de las hazañas de su hija.
Y añadió: "Al principio con su papá dudamos, pero con él nos prometimos que nunca le íbamos a decir que "no" a nada, porque el "no" ya lo tenía en la sociedad, por ende siempre vamos a abrirle el camino para que pueda hacerlo" y así fue. Jachu participó, nadó toda la carrera y "¡No salió última!".
El agua se convirtió en un medio, en aquello que la hacía sentir bien, fuerte, "empoderada" en situaciones en las que capaz no se sentía cómoda, como por ejemplo en el colegio al asistir a uno integrado dónde a medida que iban pasando los año la diferencia intelectual se notaba más. "Ella se sentía muy fuerte cuando iba a un cumpleaños e iba a una pileta y sus amigas no sabían nadar. Porque sentía que había algo en lo que ella era mejor”, contó su mamá. Y agregó: “Ella soñaba y lloraba ‘mamá yo quiero ser sirena’" y hoy lo es. Jacinta lo expresa, se siente una sirena en el agua y está muy contenta de serlo.
Hoy su sueño es ir a Japón a competir, y su madre ansía que el Gobierno (quien por lo que cuenta Raquel, sólo aporta una pequeña ayuda económica) la beque. Pero, no pareciera ser algo a punto de ocurrir. "Lo que pasa es que el Síndrome de Down no tiene federación, entonces cada vez que vas al Gobierno a pedir algo, le falta la patita para que se legalice, pero bueno son todas esas cosas que hacen falta", explicó Raquel Ranceze. "Yo siento que es respeto lo que falta, respeto a los atletas. Ella es una gran atleta, gran representante, orgullosa de su país, orgullosa de llevar la bandera argentina. Le cambia la cara cuando lleva la bandera, cuando está en el podio, y no es por ella, sino que siente de verdad esa responsabilidad de lo que está haciendo", concluyó.
Desde este martes al 27 de marzo se desarrollará el Campeonato Sudamericano de Natación con los mejores exponentes en dicha disciplina, y el cual será clasificatorio para los Juegos Olímpicos de Tokio. Delfina Pignatiello y Virginia Bardach serán parte del equipo nacional y Jacinta Martínez Ranceze será la encargada de realizar uno de los shows de apertura en el natatorio del Parque Olímpico dentro de la categoría Síndrome de Down.
“Estoy feliz. Un poquito nerviosa puede ser. Algunas veces tengo nervios acá adentro –señalando su cabeza- y algunas veces se sienten como mariposas en la panza. Estuve ensayando un montón. La canción es divina, se llama “Two worlds” (Dos mundos) y es de Tarzan”, apuntó Jachu sobre el solo que realizará hoy en la apertura.
Y su entrenadora, Martina Frljanic (21 años), reflexionó orgullosa: "Que Jacinta esté presente en el sudamericano y pueda mostrar su rutina de solo es muy importante para hacer visible la verdadera integración en el deporte, hacer visible que nada es imposible y que todos somos capaces de alcanzar nuestros sueños y metas a través de la constancia y pasión por el deporte. Estoy muy contenta y agradecida de poder formar parte y ser su entrenadora para acompañarla en este camino y comenzar de a poco a aportar para que la integración en el deporte y sobre todo en el nuestro, la Natación Artística, en la Argentina crezca y se practique en todo nuestro país".
Este torneo iba a realizarse el año pasado pero debido a la pandemia de Covid 19 debió postergarse y en esta oportunidad volverán a ser los organizadores la Confederación Sudamericana de Natación (CONSANAT), la Confederación Argentina de Deportes Acuáticos (CADDA) y la Subsecretaría de Deportes de la Ciudad.
Participarán las disciplinas de natación, natación en aguas abiertas, natación artística, saltos ornamentales y polo acuático y contará con la participación de nuestro país, Brasil, Uruguay, Paraguay, Colombia, Perú, Venezuela, entre otros.
Las mujeres seleccionadas para representar a la Argentina son: Andrea Berrino, Candela Raviola, Mainque Mujica, Delfina Dini, Delfina Pignatiello, Irina Guadalupe Bustos, Julia Sebastián, Lucía Gauna, Macarena Ceballos, Guillermina Ruggiero, Selene Alborzen, Tamara Pons y Virginia Bardach. Mientras que los hombres son: Agustín Hernández, Dante Nicola, Federico Ludueña, Franco Melián, Gabriel Morelli, Guido Buscaglia, Ivo Cassini, Joaquín González Piñero, Joaquín Renzi, Juan Bautista Carrocia, Juan Ignacio Méndez, Martín Carrizo Yunges, Nicolás Deferrari, Nicolás Weigandt, Roberto Strelkov y Valentín Constantino.
Primero será el turno de la natación y de la natación artística, cuyas competencias se llevarán a cabo del 16 al 19 de marzo. Del 21 al 27 se realizará la competencia de polo acuático. Del 24 al 27 tendrá lugar la de clavados y la de aguas abiertas está a confirmar. Según confirmaron desde la CADDA, se espera que participen 250 nadadores la primera semana y 200 la segunda.
La ceremonia inaugural está prevista para el martes 16 a las 17.45h y para ver el calendario completo de las competencias acá: cadda.org.ar/calendario-sudamericano/