Un parrillero de 67 años se atrincheró en su puesto de choripanes en Costanera Norte por más de cuatro horas. Con un cuchillo en su cuello, el hombre amenazaba con quitarse la vida porque le querían sac ar el carro en el que vende comida. Tras calmarse, la policía de la Ciudad se lo llevó detenido.
El principal pedido de Juan Carlos era "no me saquen el trabajo". Con lágrimas en los ojos, un cuchillo en la garganta, encadenado a su puesto y con un celular en la oreja derecha, el parrillero intentaba hablar con los canales de televisión.
Con gritos y amenazas, Juan Carlos habló con Georgina Barbarrosa durante una hora y media. Desesperada la conductora del canal Cronica TV trataba de calmarlo ante las constantes amenazas de suicido. "Por favor no hagas nada, pensá en tu familia", eran las súplicas desde la televisión.
Con el correr de las horas, todos los carriles mano a Retiro terminaron bloqueados. La principal denuncia del parrillero era que el Gobierno de la Ciudad le había quitado el permiso para trabajar allí y lo querían desalojar. Sin embargo, el problema de Juan Carlos no era sólo que le querían sacar el trabajo, sino que también su hogar, ya que ese cubículo también era una vivienda para él.
Después de cuatro horas en el lugar y tras la llegada de la policía, la fuerza de seguridad se lo llevó detenido.