Una familia tipo porteña necesitó $18.082 en marzo para no ser pobre

Según el informe difundido por la Dirección General de Estadística y Censos (DGEyC) de la Ciudad, el mes pasado un hogar compuesto por una pareja propietaria de vivienda y hijos, precisó $8.810,71 para poder acceder a la Canasta Básica Alimentaria y no ser considerada indigente.

Ese mismo hogar, que no debe afrontar el pago de un alquiler, debió contar con $18.082,01 para evitar caer en la pobreza y poder alcanzar la Canasta Básica Total.

El costo de la canasta de alimentos sufrió un aumento de 21,3 por ciento en marzo pasado respecto del mismo período del año anterior.

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Esa misma canasta registró un incremento de 2,95 por ciento con relación a febrero. En el caso de la Canasta Básica Total, que incluye bienes y servicios no alimentarios, el aumento interanual fue de 23,6 por ciento, mientras que frente a febrero fue de un 3 por ciento.

Por su parte, una pareja de jubilados propietaria de vivienda en la Ciudad tuvo que contar con $4.448,69 para no caer en la línea de indigencia.

Ese mismo hogar debió tener una entrada mensual de $8.987,33 para evitar ser pobre. En tanto, para una vivienda integrada por una pareja económicamente activa que no sea propietaria, la Canasta Básica Alimentaria tuvo un costo de $5.344,2, lo cual implicó un ajuste interanual de 21,3%.

Para poder acceder a la Canasta Básica Total, el ingreso necesario para ese hogar fue de $13.190,96, al percibir una suba de 26,3% frente a marzo de 2017.

Según el sondeo, un hogar unipersonal cuyo integrante es económicamente activo y propietario, tuvo que tener en marzo $2.888,76 para no ser indigente.

A su vez, la entrada necesaria para no ser considerado pobre fue de $6.514,99.