Esta disciplina de conocimiento, considerada no científica, tiene como objetivo dar a conocer la relación que hay entre los astros y los sucesos que afectan a la Tierra y a los seres humanos.
Los doce signos del zodíaco, que están determinados según la fecha de nacimiento, podrían de alguna manera determinar características de la forma de ser de las personas y la manera en la que deciden enfrentar ciertas situaciones.
¿Cuáles son las parejas más tóxicas del horóscopo?
Leo y Cáncer
Leo es un ardiente signo de fuego y Cáncer un sentimental signo de agua. El primero anhela la aventura y el segundo el hogar. Leo es demasiado franco para la sensibilidad de Cáncer, lo que puede ser una situación difícil de soportar para ambos signos.
Capricornio y Acuario
Como signo de tierra, Capricornio es minucioso, cauteloso y se mueve a un ritmo lento. Hace planes detallados y no le gustan los cambios repentinos. Acuario, por su parte, es un relajado signo de aire que lo nueve la espontaneidad. Su relación es tóxica porque sus intereses suelen ser completamente distintos.
Virgo y Géminis
Los Virgos son prácticos y realistas, características del elemento al que pertenecen y que contrastan con la actitud soñadora e inquieta de un signo de aire como Géminis. Lo que hace que estos signos se involucren en una relación tóxica es su incapacidad de comprenderse.
Libra y Tauro
Como signo de tierra, Tauro es muy reservado para la actitud extrovertida de Libra que, como signo de aire, necesita sentirse libre. Ambos son testarudos y las pequeñas diferencias pueden ser su perdición.
Escorpio y Piscis
Ambos pertenecen al mismo elemento (agua) y viven el amor con mucha intensidad. Sin embargo, lo que ocasiona que choquen es la forma de expresas sus emociones. Escorpio no tiene tacto para decir las cosas, mientras que Piscis es muy suave. Además, el espíritu libre de Piscis le hace sentir celos a Escorpio y puede sofocarlo.
Sagitario y Cáncer
Como signo de fuego, Sagitario es ardiente, aventurero, curioso y activo. Cáncer es más hogareño y profundo. Si bien pueden llevarse bien en el sexo, como pareja tienen intereses distintos por su naturaleza. La falta de equilibrio los lleva a involucrarse en una relación tóxica.