El multimillonario israelí Ehud Arye Laniado murió en un quirófano de un paro cardíaco mientras se sometía a una operación para agrandarse su pene.
El magnate tenía 65 años y su fortuna estaba basada en la explotación de la industria del diamante.
Leniado, a quien sus allegados apodaban como “el argentino” porque parecía un bailarín de tango, se trasladó a París para realizarse la cirugía en su miembro, pero acabó encontrando la muerte.
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Además, desde su entorno informaron a varios medios de comunicación europeos que el millonario sufría del complejo de Napoleón por su baja estatura y siempre estaba "enfocado en su apariencia y en cómo otros lo percibían".
Por su parte, Omega Diamonds, la compañía de Laniado, expresó su dolor en Instagram:
"Adiós a un empresario visionario... Después de vivir una vida excepcional, Ehud será llevado de regreso a Israel como su lugar de descanso final. Todos nosotros lo echaremos de menos".