El papa Francisco reapareció este domingo ante miles de fieles desde el Vaticano y agradeció "de corazón" los mensajes que recibió mientras estuvo internado en un hospital de Roma tras ser operado del abdomen. "Deseo expresar mi gratitud a quienes en los días de mi internación en el policlínico Gemelli me han manifestado afecto y amistad y me han asegurado el apoyo de la oración", expresó el pontífice al rezar el tradicional Ángelus desde el Palacio Apostólico hacia los presentes en la Plaza San Pedro.
"Esta cercanía humana y espiritual fue para mi de gran alivio y ayuda. Gracias a todos, gracias a ustedes, gracias de corazón", afirmó Francisco, de 86 años, que fue dado de alta el viernes luego de haber sido intervenido el último 7 de junio.
Después la oración, el Papa lamentó una vez más el naufragio frente a las costas de Grecia que provocó al menos 78 víctimas esta semana y pidió "que siempre se haga todo lo posible para prevenir tragedias similares".
Francisco también tuvo palabras para el ataque en la noche del viernes de un grupo rebelde de filiación yihadista contra una escuela de educación secundaria en Uganda, que dejó al menos 41 muertos. "Rezo por los jóvenes estudiantes víctimas del ataque brutal cometido contra una escuela en el oeste de Uganda", dijo el Papa tras el rezo del Ángelus.
Después de su reaparición en el Vaticano, Francisco recibirá el próximo miércoles al presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva. La reunión entre el pontífice y el líder latinoamericano está prevista a las 14.30 locales (9.30 de la Argentina) en un salón del Aula Pablo VI.
El encuentro será el primero en el que Lula visite a Jorge Bergoglio como presidente. El último encuentro entre ambos fue en febrero de 2020. En 2019, a través del dirigente social Juan Grabois, el Papa había enviado un rosario bendecido a Lula mientras el ahora mandatario estaba en prisión.
Un día antes, en hora a confirmar, el Papa recibirá al presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, según confirmaron fuentes de la Santa Sede.
Por otra parte, Francisco dispuso que el ex secretario del fallecido Benedicto XVI, el obispo alemán Georg Ganswein, vuelva a partir del 1 de julio a su diócesis de origen, en una decisión de peso contra el obispo considerado parte de los sectores conservadores de la Curia y autor de un libro con duras críticas a Jorge Bergoglio.
"Con fecha 28 de febrero de 2023, monseñor Georg Ganswein terminó su mandato como Prefecto de la Casa Pontificia. El Santo Padre dispuso que monseñor Ganswein desde el 1 de julio vuelva, por el momento, a su diócesis de origen"; planteó un comunicado de la Santa Sede.
Así, tras años de haber sido mantenido en el cargo al que había llegado con Benedicto pero sin funciones efectivas a partir de la desconfianza que le tenía el círculo cercano a Francisco, Ganswein deberá volver a Friburgo desde el mes próximo.
Francisco y Ganswein se encontraron a inicios de año, días después de la muerte de Joseph Ratzinger y mientras el monseñor alemán publicaba un duro libro contra el Papa. Considerado un histórico crítico de Francisco, Ganswein publicó entonces el libro "Nada más que la verdad. Mi vida al lado de Benedicto XVI", en el que relata a modo autobiográfico sus años como secretario del pontífice emérito fallecido el 31 de diciembre, a los 95 años.
En el libro, Ganswein lanzó duras críticas contra el Papa y reveló que se sintió "humillado" cuando Francisco decidió removerlo de sus funciones como prefecto de la Casa Pontificia, aunque sin despedirlo.