El fundador y consejero delegado de Tesla, Elon Musk, confirmó este lunes que no tiene intención de cortar el servicio de comunicaciones por satélite Starlink de su empresa SpaceX que ofrece a las autoridades ucranianas, incluso si finalmente no cuentan con financiación del Pentágono de Estados Unidos.
"Antes de que el Pentágono envíe una respuesta, le dije a Mijail Fedorov (ministro de Transformación Digital de Ucrania) que SpaceX no cerraría Starlink incluso si el Departamento de Defensa de Estados Unidos se niega a proporcionar fondos", señaló el magnate en Twitter.
Esta declaración de Musk fue aplaudida por Fedorov, quien le agradeció en nombre de Ucrania que mantenga este apoyo "vital importancia".
Hace una semanas, los medios estadounidenses informaron de que Musk había solicitado al Pentágono que se hiciera cargo de las facturas de Ucrania por el servicio de las más de 20.000 terminales de Starlink que había cedido en un primer momento.
Si bien el magnate aclaró que no había reclamado el reembolso de los primeros costos, dijo en que su empresa no podría hacerse cargo constantemente estos servicios, pues las pérdidas ascenderían hasta los 120 millones de dólares para final de año y a hasta los 400 millones de dólares para los próximos doce meses.
El viernes pasado, el titular de Defensa de Ucrania, Alexéi Réznikov, dijo en una entrevista que Kiev "no tendrá ningún problema" para mantener activo el servicio de Starlink y está en contacto directo con el magnate sobre su financiación. El funcionario indicó que los fondos del Pentágono destinados para el apoyo a Ucrania, así como de Europa y de donantes privados, pueden ser encauzados para pagar los servicios de Internet proporcionados por la empresa de Musk.
Starlink es un proyecto de SpaceX que busca ofrecer banda ancha rápida a nivel global, incluso en comunidades o lugares donde el servicio de Internet sea inexistente, caro o poco fiable.
Actualmente, alrededor de 25.000 unidades de satélite Starlink están funcionando en Ucrania. Según el magnate, esta operación le ha costado a SpaceX 80 millones de dólares y se espera que la cifra supere los 100 millones de dólares para finales de este año.