El Papa Francisco recordó a "todos los que sufrieron y murieron" durante la última dictadura militar chilena que tuvo como líder a Augusto Pinochet.
Lo hizo al encabezar una misa frente a pueblos de la Araucanía en el aeródromo de Temuco, a 600 kilómetros al sur de Santiago.
En ese lugar funcionó un centro de detención y tortura mientras estuvo el régimen de Pinochet. La misa se celebra en la Base Aérea de Maquehue en Temuco, lugar que se construyó en tierras tomas de los indígenas mapuches a principio del siglo XX.
"Esta celebración la ofrecemos por todos los que sufrieron y murieron, y por los que cada día llevan sobre sus espaldas el peso de tantas injusticias”, declaró Francisco, antes de pedir un minuto de silencio “ante tanto dolor y tanta injusticia”.
A la celebración dedicada a pueblos de la Araucanía asistieron mapuches chilenos y argentinos, a los que pidió rechazar la violencia y dedicarse a la construcción de la paz.
La referencia a los crímenes cometidos durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) anticipa el encuentro que tendrá el Papa mañana, en su última actividad en suelo chileno, cuando se encuentre “cara a cara” con dos víctimas del régimen militar en el aeropuerto de Iquique.
Las palabras de Bergoglio se dieron luego de que organismos de Derechos Humanos denunciaran en las últimas semanas que el lugar funcionó como un centro clandestino de detención y tortura durante la época pinochetista.