Yvette Luhrs es una prostituta que se postuló para ser diputada en los Países Bajos y que podría lograr su bancada representando al partido BIJ1según las encuestas.
“Habrá quién se extrañe de que una prostituta se postule a diputada”, dijo la neerlandesa Yvette Luhrs, de 36 años, que confió que se prostituye por amor a “la sexualidad” y se presenta a las elecciones en Países Bajos en busca de un escaño desde el que defender los derechos de las “trabajadoras sexuales”.
“Tengo muchas opciones para ganarme la vida, pero me gusta el hecho de poder usar mis conocimientos intelectuales y mi cuerpo para ganar dinero”, sentenció, después de relatar su paso por la Universidad de Ámsterdam en los Países Bajos para especializarse en “estudios de medios y pornográficos”, atraída por su interés en “la sexualidad” como tema.
Yvette Luhrs empezó siendo actriz porno y después probó espectáculos de webcam en internet, hasta que el año pasado pasó a la prostitución en el Barrio Rojo, ejerciendo en clubes, en los ventanales y como "escort", viendo diferentes trabajos en la industria sexual y dándose cuenta de que el distrito de Ámsterdam ofrece un lugar seguro para trabajar de forma independiente y con cohesión social.
En una entrevista en su casa de un pueblo del municipio de Ámsterdam, Yvette Luhrs consideró “muy poco feminista decirles a las mujeres que no están en su sano juicio porque deciden ciertas cosas”, como ejercer la prostitución, una idea que quiere defender desde el Parlamento de La Haya si sale elegida en las elecciones que celebra Países Bajos el próximo 17 de marzo, de las que también saldrá la nueva composición del gobierno.
Su decisión de dar el paso a la política para aspirar a ser diputada empezó con la pandemia, después de que se prohibiera ejercer la prostitución, al ser considerada una “profesión de contacto”, arriesgada para los contagios con el coronavirus. Pero al mismo tiempo, las “trabajadoras sexuales” tampoco tenían acceso a ayudas del Gobierno al no ser autónomas, ni tener contrato.
“El trabajo sexual está en medio de las dos opciones, y por eso nuestro gobierno decidió que no iba a dar ninguna ayuda financiera, lo cual es extraño porque las trabajadoras sexuales pagan sus impuestos y la seguridad social. Mi comunidad ha sufrido”, asegura, incluyendo a personas LGTBI que se dedican a la prostitución.
Todos ellos organizaron durante el último año protestas y escribieron cartas al Ejecutivo de La Haya, solicitando que se les permita volver a ejercer o se los incluya en los esquemas de ayudas sociales, pero no han recibido “ninguna respuesta, ni hubo ningún cambio”.
Esto llevó a Yvette Luhrs a sumarse a BIJ1. Y podría irrumpir como diputada por primera vez en el Parlamento neerlandés, según las encuestas, BIJ1 es el “primer partido de Europa fundado por una mujer negra”, la presentadora Sylvana Simons, para luchar contra el racismo y la discriminación, y ahora también combatir los estigmas que rodean la prostitución y luchar por los derechos de las trabajadoras sexuales en Países Bajos.
“Da igual lo que hagas como ciudadano, las grandes decisiones se toman en La Haya y ahí es donde tenemos que estar”, subrayó Luhrs, que lamentó que, durante las últimas dos décadas, las prostitutas neerlandesas han perdido "más de la mitad de su espacio legal de trabajo” debido a la reducción de licencias a los burdeles y clubes.
Reconoce que “el trabajo sexual es un tema un poco difícil para la gente, también para los municipios, por lo que hay muchas reglas falsas, como si se puede o no trabajar desde casa, se debe o no tener una licencia... lo que hace difícil a las trabajadoras sexuales ser sus propias empleadoras” y que acaben dependiendo de los burdeles.
“BIJ1 defiende la despenalización del trabajo sexual, sentar a la mesa a las trabajadoras sexuales a la hora de debatir una nueva ley, y darles la posibilidad de trabajar de forma independiente”, subraya.