"Me dirijo a ustedes hoy con un sentimiento de profunda tristeza y dolor", afirmó este viernes al mediodía el rey Carlos III en lo que fue su primer discurso a la nación británica como monarca, tras la muerte de su madre, la reina Isabel II, ocurrida ayer. "Renuevo la promesa de mi madre de servirte toda mi vida", enfatizó el ex príncipe de Gales.
La reina Isabel "hizo sacrificios y su dedicación como soberana nunca cedió en los momentos de alegría y tristeza", resaltó el rey Carlos III. "Las instituciones del estado han cambiado pero a pesar de los cambios y desafíos nuestra nación ha seguido prosperando y floreciendo. Nuestros valores deben permanecer firmes y constantes", añadió, quien aseguró: "he sido educado para servir a los demás".
Luego señaló que el fallecimiento de la Isabel II es "inspiración" para millones de personas, para él y para la familia real. Carlos habló de la reina desaparecida somo su "madre amada" y enfatizó "el espíritu de servicio" y "devoción" que aplicó en su reinado, pero también su calor "humano".
"En la devoción de la reina hoy prometo servir a la Constitución de nuestra nación mientras esté vivo en el Reino Unido y donde sea que viva. Estaré al servicio con lealtad, respeto y amor", subrayó.
Es un "momento de grandes cambios para mi familia, cuento con el amor de mi amada esposa Camila; desde que nos casamos se ha convertido en mi reina consorte, sé que estará a la altura de su rol", afirmó Carlos III. "William tomará el título escocés y será mi sucesor como duque de Cornualles, y asumirá las responsabilidades que yo he asumido durante 50 años", anticipó.
Así, el rey anunció a la nación el nombramiento de William, su hijo mayor -con Lady Di- y nuevo heredero al trono, como príncipe de Gales y de su esposa, Kate, como princesa de Gales.
Carlos mencionó inmediatamente a su hijo Harry. "Siento afecto por Harry y Megan (su esposa), espero que continúen construyendo sus vidas en el extranjero", completó.