El Departamento de Transporte (DOT, por sus siglas en inglés) de EEUU multó a la empresa American Airlines con US$4,1 millones por infringir la ley federal que prohíbe los retrasos de tres o más horas en una pista de aterrizaje nacional sin permitir a los pasajeros bajar de la aeronave.
La investigación llevada a cabo por el DOT determinó que, entre 2018 y 2021, la aerolínea estadounidense permitió que 43 vuelos nacionales permanecieran en la pista durante largos periodos de tiempo sin brindar a sus 5.821 pasajeros la oportunidad de desembarcar.
La mayoría de los retrasos ocurrieron en el Aeropuerto Internacional Dallas-Fort Worth, donde American es la aerolínea dominante, y otros ocurrieron en San Antonio y Houston cuando vuelos que se dirigían a Dallas fueron desviados a sus aeropuertos. Muchos se registraron durante tormentas eléctricas.
Esta es la mayor multa jamás impuesta en el país por retrasos en pistas de aterrizaje. El Departamento de Transporte ha aplazado el pago de la mitad de la sanción, debido a que la aerolínea pagó indemnizaciones a los pasajeros que habían sufrido retrasos. "Esta es la última acción de nuestro esfuerzo continuo por hacer valer los derechos de los pasajeros", declaró el secretario de Transporte, Pete Buttigieg.
A principios de año, el DOT puso en marcha una nueva normativa que obliga a las aerolíneas a indemnizar a los pasajeros que se queden varados y a cubrir los gastos de alimentación, alojamiento y cambios de reserva.
La aerolínea se mostró especialmente en desacuerdo con los retrasos en el Aeropuerto Nacional Reagan de Washington durante una tormenta invernal en enero de 2019, pero aceptó el esquema del acuerdo en la orden de consentimiento.