Con el objetivo de llegar a Europa a través del Mediterráneo para tener una vida mejor, al menos 41 personas de África murieron en un naufragio frente a la sureña isla italiana de Lampedusa, informaron medios italianos.
Los sobrevivientes, tres hombres y una mujer, explicaron que un barco, con un mínimo de 45 personas a bordo, el cual había partido el 3 de agosto de la ciudad de Sfax, en Túnez, se dio vuelta frente a la isla del sur italiano, lo que produjo la muerte de al menos 41 de sus ocupantes.
Los sobrevivientes pudieron conservar su vida tras estar 24 horas en el agua y luego otros cuatro días aferrados a otro barco de hierro vacío, hasta que un avión de la patrulla europea Frontex los vio el pasado martes y avisó a las autoridades.
Según su primer testimonio, de acuerdo con la prensa italiana, sólo 15 de las por lo menos 45 personas que salieron de Túnez tenían chaleco salvavidas.
Sfax está a unos 130 kilómetros de la isla de Lampedusa, y desde principios de 2023 es el principal punto de partida de miles de migrantes que intentan cruzar el Mediterráneo hacia Europa.
En la isla Lampedusa hay un centro de acogida con capacidad para 300 personas, pero en estos dos últimos días llegaron a agolparse cerca de 2500 personas.
Según los últimos datos del Ministerio del Interior italiano, en lo que va de año y hasta el 4 de agosto, desembarcado 92 000 migrantes en las costas italianas, más del doble de los 42 640 del mismo periodo del año anterior.
La salida de migrantes de África subsahariana se aceleró tras un discurso, el 21 de febrero, del presidente tunecino, Kais Saied, en el que denunció la llegada de "hordas de clandestinos" venidos, según él, para "cambiar el equilibrio demográfico" del país.