ZAGREB, Croacia.- Kolinda Grabar Kitarovic es una de las grandes celebridades de este Mundial. No juega en ningún equipo ni dirige a ninguna selección. Es nada menos que la bella presidenta de Croacia, a quien se la vio eufórica en los palcos junto al titular de FIFA en algunos partidos de la selección de su país.
Kolinda confesó por estas horas que está ansiosa y no sabe “cómo aguantar hasta el domingo”, día de la final del Mundial-2018 entre Francia y Croacia en Moscú. “Desbordo entusiasmo. No sé cómo voy a aguantar hasta el domingo”, afirmó la jefa de Estado croata a los periodistas. La presidenta de centro-derecha se había perdido la semifinal contra Inglaterra (victoria 2-1 en alargue) debido a la cumbre de la OTAN, aunque sí había viajado a Rusia para ver los octavos de final frente a Dinamarca y los cuartos contra el equipo anfitrión.
Muchas imágenes difundidas por internet y colgadas en las redes sociales mostraban a la presidenta vistiendo la casaca a cuadros blancos y rojos, en la tribuna festejando o saludando a los jugadores en el vestuario. “Parto para ver la final, no solamente como mujer política y como presidenta, sino como hincha apasionada del fútbol croata” y como “alguien que ha jugado al fútbol”, contó. Kolinda Grabar Kitarovic anunció que le regalará una casaca de la Cuadriculada a su colega francés Emmanuel Macron, al igual que lo había hecho en Bruselas con la Primera ministra británica Theresa May.
“Esta generación de caballeros de Dalic ha superado a la generación de los chicos de Ciro”, encontró en relación a Ciro Blazevic, el técnico de Croacia cuando llegó a semifinales en el Mundial de Francia 1998. Por otro lado Kolinda se entusiasmó con que la actuación de Croacia en Rusia 2018 “puede traer un boom económico al país si sabemos explotar bien esta situación”. Eso sí: Kolinda no quiso dar un pronóstico para la final del domingo.