El Azzurro ante Midland el sábado a las 16 y el Celeste el martes a las 15.30 frente a Argentino de Quilmes. El Villero, que lleva cuatro encuentros sin victorias, recibirá a Dock Sud.
Liniers y Sportivo Italiano andan de racha. Ambos empezaron a tirar parejos y se fueron para arriba. Así los encuentra la fecha 10 del Torneo Clausura de la Primera B, en cuyo campeonato se prendieron en la lucha importante. En cambio, Deportivo Laferrere no la pasa bien y necesita recuperación urgente.
Sportivo Italiano marcha quinto, con 15 puntos, a uno de Midland y de Liniers. Y este sábado a las 16 visitará en Libertad al Funebrero.
El Tano llegará a Libertad entonado por el triunfo por 2-1 ante Los Andes, el último campeón de la B. El equipo de Fito Della Picca tiene claro que el objetivo es alejarse de la zona de descenso, pero automáticamente lo llevará a inflar la ilusión de ser unos de los candidatos. Así, el Azzurro enhebró su segunda victoria consecutiva, (lleva tres en el Clausura).
En tanto, Liniers, que suma 16 puntos en el tercer escalón de las posiciones, a cuatro del líder, Colegiales y a uno del escolta, Universidad Interamericana Abierta de Urquiza, tendrá un viaje de riesgo a la Barranca quilmeña, puesto que el martes a las 15.30 visitará a Argentino de Quilmes.
De todos modos, el Celeste tiene con qué responder. Es que llega dulce luego del triunfo por 3-0 ante Fénix, en Villegas, que lo dejó en el tercer lugar del Clausura y a nueve puntos del Reducido. Por eso., el Celeste sueña con luchar por un lugar entre los que pelearán por el segundo ascenso.
A su vez, también el sábado a las 14 (por DirecTV), Laferrere buscará levantarse de varios golpes de nocaut que recibió en las fechas pasadas. Esta vez, recibirá a Dock Sud en el Morumbí de La Matanza.
Seguramente será con José Luis Díaz como entrenador interino, luego de la renuncia de Guillermo Szeszurak. Pese a que arrancó el ciclo con una derrota dura por 3-0 frente a Flandria, en Jáuregui, Joe seguirá en el cargo, pero todo dependerá de lo que suceda ante el Inundado, ya que el Villero lleva cuatro partidos sin ganar.