Después de participar en Tokio 2020, su último Juego Olímpico, la judoca Paula Pareto fue recibida con gran cariño por sus compañeros del Hospital de San Isidro, que le hicieron un pasillo de honor.
Además de los aplausos, las paredes del hospital fueron decoradas con globos que le daban la bienvenida a la ahora ex deportista argentina.
Después de unos días de vacaciones, la “Peque” volvió a su trabajo como médica cirujana en ortopedia en el Hospital Central de San Isidro, y se encontró con la sorpresa: “Vuelta a la guardia con sorpresa de bienvenida en mi segunda casa. No por nada se le llama residencia, ¿no?”, escribió la atleta en su perfil de Instagram junto a tres imágenes.
La judoca Paula Pareto viene de atravesar momentos de mucha emoción tras los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, en donde cerró su carrera como deportista profesional con un diploma y un enorme reconocimiento por sus logros competitivos.
“¡Gracias por este recibimiento y por tantos años de paciencia y aprendizajes!”, agregó la ganadora de la medalla dorada en los Juegos de Río de Janeiro 2016.