Mientras algunos aún celebraban la llegada de la Navidad y otros descansaban tras los festejos por la Nochebuena, un grupo de delincuentes aprovechaba el momento para concretar un robo muy particular como es el de un avión.
Esto fue lo que sucedió en las primeras horas del domingo 25 de diciembre en la provincia de Chaco, donde cuatro delincuentes ingresaron y se llevaron una avioneta Cessna 206, matrícula LV-KEY.
Según se pudo reconstruir en base a las imágenes de las cámaras de seguridad del lugar, los delincuentes sabían perfectamente lo que iban a hacer, por lo que se supone que fue un robo por encargo.
Antes de violentar el portón de acceso al hangar donde estaba la aeronave, chequearon que podían abastecerse de combustible en el surtidor del lugar, luego sacaron la avioneta, le llenaron el tanque, chequearon que estaba apta para volar y le hicieron un puente a la batería para poder poner su motor en marcha y enfilaron hacia una pista que no está señalizada (que no cuenta con balizas) desde donde despegaron.
El hecho es investigado por el fiscal de turno Víctor Recio quien ya tiene en su poder dichas imágenes así como el registro y seguimiento de Flightradar que da cuenta que la aeronave robada pasó la frontera con Paraguay y luego siguió a Bolivia.
Este Cessna (Número de serie 206-0208) pertenece a un empresario local dedicado a la forestación, y si bien tiene 58 años de antigüedad está valuada en US$ 350.000.
La denuncia fue radicada por Fernando Heñin, directivo del Aeroclub Chaco y las actuaciones iniciales estuvieron a cargo del personal de la comisaría de Basail.
Se estima que los malvivientes la llevaron para ser usada para el narcotráfico y que estando ya en países vecinos puede que haya sido repintada y se la haya colocado otra matrícula, por lo que sería imposible recuperarla.