Lorena Centurión, una joven de 20 años, fue asesinada a golpes en la cabeza este domingo por la madrugada en la localidad de Mercedes, provincia de Corrientes, luego de haber tenido una fuerte discusión con el único sospechoso de haber cometido el crimen, su novio.
La pareja de la víctima, principal y único sospechoso por el femicidio, luego se disparó dos tiros (solo uno impactó en su cabeza) y se encuentra internado en estado de coma.
El hecho ocurrió pasadas las 7 de la mañana del domingo y los gritos de la pareja, que convivía desde hacía unos pocos meses, pusieron en alerta a los vecinos. Cuando la pelea se interrumpió abruptamente, seguida por el estruendo de dos detonaciones, quienes estaban oyendo la pelea decidieron llamar al 911 y la policía llegó al lugar.
Tristemente, Lorena Centurión ya estaba muerta cuando los efectivos ingresaron al domicilio. La brutalidad del crimen del que había sido víctima era evidente, con heridas gravísimas en la cabeza y marcas de golpes en todo el cuerpo. Junto a ella estaba su novio, Nicolás Niz, de 22 años, con un disparo en la sien, pero todavía vivo.
Niz fue trasladado al centro médico más cercano y derivado después por la gravedad de la herida al Hospital Escuela de la capital correntina, donde quedó internado en estado de coma inducido.
Según se relata en el Diario Época, allegados a la joven asesinada señalaron que Centurión y Niz convivían desde hace varios meses y casi al mismo tiempo comenzaron los problemas entre ellos, fundamentalmente, por los “celos enfermizos” del joven para con su novia.
En este contexto, testigos de la relación entre Lorena y Niz remarcaron que “la convivencia estaba trazada por la violencia y el abuso de estupefacientes por parte del muchacho”, y que el hostigamiento a la víctima era constante.
De acuerdo a la reconstrucción, la pareja volvió a discutir en la madrugada del domingo y Niz golpeó a la chica en la cabeza hasta matarla. Después, fue a buscar agua para intentar reanimarla y, como no lo logró, tomó un revólver calibre 22 y se descerrajó dos disparos en la cabeza. Solo uno dio en el blanco y lo dejó al borde de la muerte.
El fiscal a cargo de la investigación indicó que la causa se caratuló como “femicidio y tenencia ilegal de arma de fuego. El caso está resuelto y depende de la salud del imputado, si sobrevive o no, para continuar con el proceso”.
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