Diego Loscalzo, el autor de la denominada “Masacre de Hurlingham ”, se negó a declarar este miércoles ante la fiscalía de Morón, por consejo de su abogado defensor.
A las 8.45 el acusado llegó al edificio en medio de un impresionante dispositivo de seguridad, donde compareció ante la titular de la Unidad Funcional de Instrucción Temática de Violencia de Género de Morón, Paula Hondeville, para que sea indagado acerca de los hechos que lo llevaron a acabar con las vidas de su pareja Romina Maguna (36), Vanesa Gisella Maguna (38), Juana Paiva (55), José Eduardo Maguna (34) y Darío Daniel Díaz (33); y las “tentativas de homicidio calificado por el uso de armas” de Mónica Beatriz Lloret (36), de su hija adolescente Camila y de Cinthia López Gotta (35).
Una vez en el lugar, se puso en conocimiento de Loscalzo cuáles son los crímenes que se le imputan y cuál es la calificación legal correspondiente a esta instancia del proceso
“Cumplimos con el acto procesal de tomarle declaración de acuerdo al artículo 208 del Código Penal. Fue asistido por el defensor oficial, el doctor Fernando Rivero, que le aconsejó que se niegue a declarar y Loscalzo de acogió a ese consejo”, indicó la fiscal Paula Hondeville a diversas señales de noticias.
La fiscal informó que no hay ninguna duda acerca de la responsabilidad del acusado en estos hechos.
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Por lo pronto, se determinó que Loscalzo continuará detenido con prisión preventiva, como viene ocurriendo desde que fuera capturado este lunes en la provincia de Córdoba, tras huir de Buenos Aires luego de cometer la masacre.
Además, la fiscal Hondeville dijo que para comprobar que hubo asesinato en el caso de Mateo, el bebé que tenía fecha de parto para el día lunes pero murió a raíz de las heridas sufridas por su madre, Mónica Lloret, se necesita realizar las pericias médicas correspondientes para definir la calificación legal que le corresponde a Loscalzo.
En la misma señal, en un diálogo entre la movilera y el conductor, Claudio Rígoli, indicaron que ahora se buscaría determinar si Mateo nació muerto o llegó a estar vivo en algún momento ya que carece de partida de nacimiento y por ende de documento de identidad, lo que dificultaría procesar su deceso como un asesinato.
Esto lo diferenciaría del caso de Isidro, el bebé de Carolina Píparo, que llegó a vivir una semana antes de morir a causa de las heridas que recibió en el útero de su madre durante un tiroteo. De todas maneras, Rígoli indicó que la ley establece que si un bebé que supera los ocho meses de gestación muere, se le debe confeccionar una partida de nacimiento para poder emitir un certificado de defunción.