Dos carreros que trasladaban autopartes de dudosa procedencia en Ingeniero Allan fueron detenidos por efectivos de la comisaría 5ta de Florencio Varela.
Los uniformados, que patrullaban la zona, detectaron que los sujetos trasladaban en un carro tirado por un caballo elementos que realmente llamaron la atención.
El equino de tamaño mediano directamente estaba acarreando un auto prácticamente entero ya desmantelado.
Según fuentes policiales, se contabilizaron cuatro puertas, un capot, el baúl entero y el techo de un Renault 9.
En la intersección de 1149 y 1142, los uniformados interceptaron al carro y solicitaron la documentación que justificara la procedencia de las autopartes, pero al carecer de la misma quedaron aprehendidos por infracción a la ley que creó el Registro Unico de Desarmaderos de Automotores y Actividades Conexas (RUDAC).
En tanto que al verificar la numeración de las autopartes, las mismas aún no habían sido denunciadas como robadas.
Un desarmadero que funcionaba en un taller mecánico de Quilmes Oeste fue clausurado y su propietario detenido por efectivos de la comisaría 3ra.
Los detectives de la dependencia policial, al mando del comisario Juan Núñez, realizaron tareas investigativas de incógnito durante varios días hasta obtener el material probatorio necesario para el allanamiento
En este caso, el taller mecánico en cuestión carecía de razón social y de habilitación municipal, por lo que operaba en forma clandestina. Tras inspeccionar el lugar con apoyo del Comando de Patrullas, a cargo del comisario Francisco Centurión, hallaron autopartes de las cuales no podían dar cuenta de su verdadera su procedencia.