Un fiscal pidió que se condene a prisión perpetua a Jonathan Luna, quien es juzgado por el femicidio de Micaela Ortega, de 12 años, a la que había contactado por Facebook tras hacerse pasar por una chica y que fue hallada asesinada en mayo de 2016 en las afueras de la ciudad bonaerense de Bahía Blanca.
El requerimiento fue realizado por el fiscal Rodolfo de Lucía al alegar ante el Tribunal Oral Criminal Nº 1 de Bahía Blanca, que el jueves próximo dará a conocer su veredicto en este primer caso de “grooming” (acoso de menores a través de las redes sociales) que terminó con el crimen de la niña.
Ante los jueces Claudia Fortunatti, María Elena Baquedano y Eugenio Casas, el fiscal reclamó la misma pena que pidió la abogada de la familia de Ortega, Fernanda Petersen, ya que ambos coincidieron en calificar el hecho como “homicidio agravado cometido con alevosía, para procurarse impunidad o para consumar los delitos, habiendo mediado violencia de género, comunicación electrónica con menores de edad y robo, en concurso real”.
Por su parte, el abogado Sebastián Cuevas, defensor de Luna, solicitó que su cliente sea penado con 20 años de prisión por el delito de “homicidio en ocasión de robo” y que tenga un adecuado tratamiento psiquiátrico.
Luna, quien ayer estuvo presente en la sala, se negó a declarar y fue insultado por los familiares y allegados de la adolescente, lo que generó situaciones de tensión en las que debió intervenir personal policial.
Micaela desapareció de su casa el 23 de abril de 2016 y cinco días más tarde, el cuerpo fue hallado estrangulado en las afueras de Bahía Blanca. Por el hecho, Luna fue detenido en su casa del barrio Saladero, que fue parcialmente incendiada por vecinos, y en su poder se encontraron una planchita de pelo y otras pertenencias de la niña.
Los investigadores llegaron a esta sujeto tras determinar que se había contactado con la niña a través de Facebook luego de hacerse pasar por una chica de su misma edad. Para obtener ese dato, fue clave el aporte de una ONG estadounidense que logra que las empresas proveedoras de Internet deban por ley notificarle cuando sus clientes suben imágenes de pornografía infantil a la red.
El fiscal de Lucía determinó que Luna poseía cuatro cuentas de esa red social, mediante una de las cuales captó a Micaela para lograr que fuera a su encuentro.
“Mantuvo comunicaciones electrónicas con Micaela Ortega con el fin de cometer un delito contra su integridad sexual, le sustrajo sus pertenencias y es el autor de la muerte”, expresó en su alegato.
Además, enfatizó que “Micaela estaba convencida de que estaba tratando con una mujer” y explicó que por ese motivo la niña salió de su casa el 23 de abril para encontrarse con quien creía era una nueva amistad y que por eso se llevó la planchita para el pelo, ropa, su DNI, una mochila y un teléfono viejo, tras dejar una nota manuscrita a su madre en la que le decía que se iba de su casa y que iba a estar con una amiga en Ingeniero White.
De Lucía relató que Micaela se encontró con Luna y que ambos hicieron un recorrido a pie -que fue captado por cámaras de seguridad- de más de nueve kilómetros, hasta un descampado ubicado en el kilómetro 702 de la ruta nacional 3. Una vez allí, intentó abusar de ella, le robó sus pertenencias y la mató tras golpearla y estrangularla con una remera.
Sobre el accionar de Luna en redes sociales, detalló que “en forma constante contactaba a mujeres menores de edad con el fin de tener relaciones con ellas, las engañaba con la edad y le ocultaba su verdadera identidad”.
A su turno, la abogada Petersen consideró que al imputado “es un personaje criminal, que pudo pensar cada uno de sus pasos y que estuvo esperando como un lobo a su presa. Tenía un plan criminal macabro, elegía a las víctimas por ser mujeres, por ser vulnerables”, afirmó Petersen, quien destacó que Luna comprende todo lo que hace, según establecieron los peritos.
También la abogada sostuvo que el imputado “es un hijo sano del patriarcado y responde a patrones misóginos y machistas por el cual se considera que la mujer es objeto, un ser de menor valor y que se puede disponer y cosificar”.