Una fiesta clandestina en la localidad de Plátanos terminó en una verdadera batalla campal, donde dos grupos de jóvenes se enfrentaron en la calle con piedras, palos y botellas, con tanta violencia que destruyeron frentes de casas, comercios y hasta un docena de autos estacionados, lo que generó fuerte malestar por parte de los habitantes de esa zona.
Según informaron fuentes policiales, la reunión ilegal se llevó a cabo en una vivienda de la calle 55, entre 43 y 44, lugar en el que concurrieron decenas de personas que de incumplían todas las restricciones establecidas por protocolo sanitario a raíz de la pandemia.
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En medio de la noche, dos grupos de jóvenes comenzaron una disputa verbal que subió de tono y dio lugar a la violencia física. Los dos bandos salieron a la calle y comenzaron a agredirse con lo que tenían a mano. Piedrazos, palazos y botellazos volaron por todo el vecindario y provocaron destrozos en el frente de varias viviendas. Incluso algunos comercios de la zona sufrieron también daños severos.
Los mayores destrozos se vieron en varios autos estacionados en la calle. Al menos 12 vehículos terminaron con vidrios rotos, abolladuras y otros daños y sus propietarios no encontraban consuelo ante tanta indignación.