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Tras permanecer en prisión por 44 años, el múltiple homicida podría ser confinado a un instituto ubicado en la localidad bonaerense de Magdalena.
Carlos Eduardo Robledo Puch, tras 44 años de encierro en distintas cárceles, podría ser trasladado a una granja de rehabilitación, ubicada en la localidad de Magdalena, debido a los problemas de salud que presenta, por deficiencias en su sistema respiratorio, de acuerdo a lo indicado por los encargados de realizarse los estudios médicos que, durante la semana, le practicaron en la Asesoría Pericial de San Isidro.
El establecimiento, perteneciente a una iglesia evangelista, está ubicado sobre la ruta 11 y en la actualidad aloja a otros 29 presos, que, en algunos casos, están cerca de recuperar la libertad. La recomendación para que el considerado máximo asesino seria de la historia criminal argentina continué sus días en ese lugar podría confirmarse la próxima semana.
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Cabe recordar que Robledo Puch abandonó, por unos horas, la Unidad Penal de Sierra Chica, en el partido bonaerense de Olavarría, para ser llevado hasta la dependencia judicial de los Tribunales de San Isidro, donde fue evaluado por su cuadro de EPOC, que lo afecta desde hace un tiempo.
Al margen del pedido de excarcelación que formulara su defensor oficial José Luis Villada y que recibiera el rechazo de un Juzgado de Ejecución Penal, a cargo del magistrado Duilio Alberto Cámora, ahora se abre la posibilidad de su futuro alojamiento en esta granja de rehabilitación de régimen abierto y en la que convivirán con otros presos, que también presentan delicados cuadros de salud.
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