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Encontraron a un anciano de 78 años asesinado en su departamento del centro de Rosario con dos heridas en su cuello provocadas con un bolígrafo.
Un hombre de 78 años fue hallado este jueves asesinado y con dos orificios en su cuello, presuntamente provocados con la punta de un bolígrafo, en el interior de su departamento del centro de la ciudad santafesina de Rosario.
La víctima, identificada por la policía como Hugo Cristian Ferrari, fue encontrada en un inmueble ubicado en el 1er Piso de la calle Zeballos al 1100, en la zona céntrica de Rosario.
Según fuentes policiales y judiciales, el hombre fue hallado sin vida por sus propios familiares que fueron a buscarlo al no tener noticias de él desde hacía varios días.
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Tras ser alertados de lo sucedido, los investigadores advirtieron que el cuerpo presentaba dos orificios en el cuello que, según presumieron, fueron realizados con un bolígrafo, lo que le provocó un gran derrame de sangre y la posterior muerte.
Mientras la Policía trabajaba en el lugar, los primeros datos hablaban de que probablemente Ferrari le abrió la puerta a un delivery.
Algunas versiones apuntan a que la víctima era joyero, algo que no está confirmado, y que había quedado viudo hace un tiempo.
El hecho es investigado por la fiscal de Homicidios, Marisol Fabbro y de efectivos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC).
Lo condenan a 25 años por matar a un pastor que había conocido en prisión
Un hombre fue condenado a 25 años de cárcel por el crimen de un pastor jubilado de 77 años al que había conocido en prisión y que en 2020 fue hallado golpeado, apuñalado y ahorcado con el cable de una plancha en su departamento del centro de la ciudad de Rosario, informaron hoy fuentes judiciales.
Se trata de Víctor González (34), quien fue hallado culpable del delito de homicidio en concurso real con hurto, en perjuicio de Leopoldo Teófilo Gamboa, quien realizaba tareas pastorales en la cárcel de Piñero, donde el ahora condenado cumplía una pena por robo.
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Según lo expuesto en el debate oral que comenzó el miércoles de la semana pasada y finalizó ayer en el Centro de Justicia Penal de Rosario, González mató al pastor la tarde del 19 de junio de 2020, tres meses después de salir de la cárcel, en un departamento ubicado en un séptimo piso de un edificio situado en la calle Zeballos 156,5 de la zona centro de Rosario.
Según la investigación del fiscal Ademar Bianchini, el jubilado había citado a González que le arreglara una ventana y entre las 16.50 y las 17.30 de ese día, cuando se encontraban solos, el ahora condenado inmovilizó a la víctima, golpeó a Gamboa con una plancha, luego le aplicó un puntazo entre el cuello y el hombro y lo estranguló con el cable de la plancha en el dormitorio.
"Luego, sustrajo un celular, una notebook y un bolso, retirándose con los elementos, acción que quedó registrada por las cámaras de seguridad del edificio. González mató a Gamboa para no ser reconocido, consignó Bianchini al pedir la pena de prisión perpetua para el acusado.
Sin embargo, el tribunal dictó una pena de 25 años de prisión y no consideró que el móvil haya sido el robo como lo planteó el fiscal en su alegato.
Es que González llegó al debate sin negar haber sido el autor del crimen de Gamboa, aunque declaró que atacó al jubilado para defenderse de un intento de abuso.
En base a ello, la defensora pública Martina Guirado solicitó que el acusado fuera condenado por homicidio cometido en exceso en la legítima defensa, lo que tampoco fue avalado por el tribunal, que declaró a González autor de homicidio y hurto.
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