Este lunes, la policía detuvo a Juan Marcelo Rearte, el conductor del Uber que trasladaba a María Caccone, la mujer asesinada por motochorros cuando iba a un banco de la localidad bonaerense de San Justo a depositar dinero, y que había sido herido durante el hecho.
De esta forma, Rearte (44) fue aprehendido en las últimas horas bajo sospechas de haber actuado como entregador, por lo que será indagado en las próximas horas, informaron fuentes policiales.
Caccone fue asesinada el jueves pasado cerca de las 14 en el cruce de Australia y avenida Ignacio Arieta, en pleno centro de la localidad de San Justo, partido de La Matanza, cuando se dirigía junto a un compañero de trabajo llamado Marcos Fabián Gonzalez (35) en el Uber conducido por Rearte (44).
Los empleados pidieron ser llevados hasta el centro de San Justo, ya que debían realizar un depósito de 120.000 pesos en el banco Comafi, pero antes de llegar a la entidad bancaria tres motochorros los interceptaron con intenciones de robo.
ADEMÁS:
Palermo: Gonzalo Bonadeo denunció que un taxista disparó a una mujer que conducía un Uber
Salidera mortal en San Justo: liberaron al hombre que se quedó con parte del dinero robado
San Justo: asesinaron a una mujer e hirieron a un remisero durante un robo
Según las fuentes, uno de ellos se bajó de la moto empuñando un arma de fuego, se acercó a la ventanilla del asiento del acompañante en la que iba Caccone y, sin mediar palabra, efectuó un disparo que impactó en su cuello.
El ladrón disparó una segunda vez e hirió al chofer en la cintura, tras lo cual tomó la cartera de la mujer, que contenía parte del dinero, y se escapó con su cómplice.
Los tres presuntos autores del hecho quedaron grabados en una cámara de seguridad de un local gastronómico situado en la misma cuadra de la calle Australia y avenida Arieta, esperando la llegada de la víctima, aunque aún no fueron capturados.
En un primer momento, se había sospechado de Marcos González como entregador debido a que en su ropa interior se encontró un fajo con 20 mil pesos, Pero el hombre dijo que los tomó cuando a uno de los ladrones se le cayó ese fajo en pleno asalto y que planeaba usarlo “para comprarle un regalo a sus hijos”. Tras su indagatoria, se determinó que no había participado en el hecho por lo que fue dejado en libertad.