Las CGT de Hugo Moyano y la Azul y Blanca de Luis Barrionuevo y la CTA de Pablo Micheli acordaron en el 9 de junio la fecha establecida para el paro nacional, con el fin de reclamar por la modificación del Impuesto a las Ganancias y por el retraso en las paritarias.
Esa fecha ya había sido propuesta por los gremios vinculados al transporte, pero faltaba la ratificación de las dos centrales obrera y la CTA.
En un encuentro que mantuvieron las cúpulas de las tres agremiaciones en la sede de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), los dirigentes decidieron por "coincidencia plena" realizar la huelga el martes 9, sin movilización.
Las dudas sobre la fecha definitiva de la medida de fuerza habían surgido desde la CTA de Micheli, que pretendía trasladarla para el 10 u 11 de junio.
Por su parte, el titular de la UTA, Roberto Fernández, reconoció que el gobierno tiene abierta la posibilidad de entablar un diálogo para responder la demanda de los trabajadores.
Asimismo, el dirigente confirmó que ese día no habrá colectivos de corta, media y larga distancia, como tampoco servicios ferroviarios, de subtes, combis ni vuelos.
De esta manera, el gremialismo opositor concretará el segundo paro contra el gobierno.
El personal agrupado en la seccional porteña de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) paralizará hoy las tareas "de forma activa" y se movilizará al mediodía hacia el Ministerio de Economía de la ciudad de Buenos Aires en demanda de un aumento.
La organización sindical, que conduce José Matassa, informó ayer que los trabajadores se concentrarán desde las 12 en Diagonal Sur y Perú y, una hora después, marcharán hacia la cartera económica.
El plenario general de delegados decidió "un paro activo y una movilización para exigir una recomposición salarial acorde con el proceso inflacionario de 2014", el que evaluaron en "casi un 40 por ciento".
"La pauta del aumento salarial -como ocurre en algunas paritarias- está muy por debajo de la necesidad de los trabajadores de recuperar el poder adquisitivo deteriorado", señaló Matassa.
El dirigente subrayó que cuando "se anuncie de forma unilateral la pauta salarial por afuera de la paritaria, la Asociación de Trabajadores del Estado realizará una consulta popular para que sean los trabajadores quienes decidan si aprueban o no la recomposición de los haberes de este año".
El gremialista denunció además "la precarización laboral" y también anunció una huelga general nacional para el jueves 28 de este mes.
La organización rechazó ayer "la pauta salarial de Macri en la ciudad" y reclamó "un aumento del 40 por ciento, un mínimo de 12.000 pesos, el cese de la precarización laboral, la eliminación de ganancias, el 82 por ciento móvil jubilatorio, jardines maternales en los sectores de trabajo y la absolución de los estatales en la causa de la represión en el Hospital Borda".