El gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez, confirmó este lunes que la provincia "no vuelve a fase 1" de aislamiento por coronavirus, al margen del decreto nacional dispuesto por Alberto Fernández.
"Mendoza no vuelve a Fase 1. Los mendocinos hemos desarrollado una estrategia que ha permitido reforzar e invertir en el sistema sanitario, pero con la economía funcionando y cuidando el empleo", señaló.
Dicha provincia mantendrá las mismas actividades económicas y flexibilizaciones tal cual están vigentes, salvo las reuniones familiares y las congregaciones en templos religiosos, que deberán esperar a la autorización de la Nación.
Asimismo, el mandatario provincial aclaró que se regresará al esquema de salidas por terminación de DNI, debido a que la fase de ASPO exige menor circulación en las calles.
"El esfuerzo de todos los mendocinos ha sido muy grande, por eso entendemos que el confinamiento, no puede ser la única respuesta. Volver a la fase 1 no es el camino", agregó Suárez.
"A los mendocinos —continuó— nos caracteriza el respeto a las instituciones, por eso continuaremos con las actividades que teníamos autorizadas, cumpliendo con la interpretación del DNU. Las reuniones familiares quedarán suspendidas, pero se podrá realizar actividad física al aire libre".
Fernández destacó el "histórico" apoyo de todos los gobernadores
Las nuevas medidas aplican en ocho departamentos: Capital, Guaymallén, Godoy Cruz, Luján, Maipú, Las Heras, Tunuyán y Tupungato. El resto de la provincia sigue en fase de distanciamiento social.
"Debemos seguir cuidando la salud, pero también la economía y el empleo. La responsabilidad individual tiene impacto colectivo. Sigamos cuidándonos, con el lavado de manos, el uso de tapaboca, el distanciamiento y sólo salir para lo imprescindible y necesario", completó el gobernador.
La decisión de avanzar en una nueva etapa de cuarentena con restricciones en al menos 18 provincias se definió el viernes por la noche tras una videoconferencia que Alberto Fernández mantuvo con todos los gobernadores y tras un anuncio que se hizo en la Casa Rosada del jefe de Estado junto con los gobernadores Gerardo Morales (Jujuy), Omar Gutiérrez (Neuquén) y Omar Perotti (Santa Fe).