El discurso del presidente muestra dos caras: el estadista y el político de acción. El primero se muestra en afirmaciones como:
a. La referencia a la ley tecnología aprobada en el Congreso con el acuerdo de la oposición. Es una norma que va elevando el porcentaje del PBI asignado a ciencia y tecnología en la próxima década. Es importante que haya sido aprobada en forma ampliamente mayoritaria por las fuerzas políticas más importantes, porque apunta a los próximos diez años y no puede ser una norma unipartidaria, ya que el mandato presidencial dura solo cuatro años.
b. En esta misma línea destacó el lanzamiento del satélite SAOCOM-2 por la empresa ARSAT, un proyecto diseñado por la CONAE. Mencionó también la tarea del INVAP, la empresa estatal que hace de Argentina uno de los pocos países que exportan reactores nucleares de investigación.
c. Destacó la necesidad de avanzar en el proyecto Pampa Azul, que apunta a la explotación del mar argentino con fines científicos y económicos, mientras destacó la importancia de Argentina en el Atlántico Sur y la vigencia de la causa de Malvinas.
Por otra parte, el político de acción se hizo notar en:
a. El cuestionamiento a la justicia y el proyecto de crear una instancia judicial que reduzca las competencias de la Suprema Corte. Criticó el funcionamiento del Poder Judicial en cuanto a su lentitud, supuesta politización y actitudes corporativas. El problema es que estas críticas generan una discusión sobre la dependencia del Poder Judicial y esto parece más vinculado a la lucha política que al perfeccionamiento institucional.
b. El anuncio de que va a iniciar acciones penales contra los integrantes del gobierno anterior por el crédito del FMI tiene cuando Argentina entra a una fase crucial de su renegociación y no parece contribuir al nuevo acuerdo.
c. Las críticas a los banderazos quizás no correspondan a un mensaje que tiene por objeto hacer el balance del año de gestión y plantear dos objetivos para que se inicien. Esto puede parecer contradictorio con los llamados a la unidad.
Es necesario asumir que las dos caras, el estadista y el político de acción, coexisten en este mensaje, leído tras la semana más difícil del gobierno en casi 15 meses de gestión, al converger la crisis de la vacunación y la sentencia contra Lázaro Báez. El problema es que en octubre se realiza la elección, y cuanto más cerca estemos de ella, más se impondrá el político de acción sobre el estadista.
(*) Director del Centro de Estudios Unión para la Nueva Mayoría