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El legislador explicó sus motivos a través de Twitter; durante la sesión hubo además 84 ausentes
Desde antes de que comenzara la sesión en la Cámara de Diputados para debatir la Ley Micaela, Alfredo Olmedo buscaba llamar la atención. Cerca de las 13:15, Emilio Monzó, presidente del recinto, llamó a los legisladores para comenzar la sesión; Olmedo tomó la palabra y pidió que se procediera a dar por caída la reunión ya que había terminado el tiempo de espera reglamentario. Lógicamente, el titular de la Cámara lo ignoró y le dio inicio a la sesión.
Tras el debate, hubo 171 votos a favor, 84 ausentes y sorpresivamente un solo voto en contra. ¿Quién fue? Olmedo. Lo más irónico es que se mantuvo callado durante todo el debate y no especificó ni dio ningún argumento sobre su postura.
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En Twitter, el legislador argumentó: “He sido el único diputado nacional que he votado en contra de la Ideología de Género, voy a seguir sosteniendo que Dios creó al hombre y a la Mujer”.
No es la primera vez que Olmedo da la nota en una sesión de la Cámara. Cuando se debatió el proyecto de interrupción voluntaria del embarazo, lanzó una curiosa e insólita idea: “si el proyecto sale, voy a proponer un cementerio para las víctimas de los abortos".
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