El informe, el cual fue enviado a la Oficina Anticorrupción (OA) para un eventual inicio de acciones, analizó la adquisición, durante 2017 de cinco aeronaves por parte de la Armada Argentina al gobierno de Francia, por parte del ministro de Defensa, Oscar Aguad.
Se señala en la auditoria que las aeronaves "no se encontraban en condiciones de vuelo y su potencial restante ya era bastante débil, razón por la cual la Marina Francesa había dejado de utilizarlas".
Aguad las compró "acompañadas con su documentación de seguimiento técnico junto a un lote de piezas de recambio, bancos de prueba, valijas de prueba, equipos de misión, herramientas y un simulador de vuelo".
El precio definitivo de transferencia de todos los materiales –aviones y elementos complementarios- fue de 12.550.000 de euros.
También en la auditoria se señalaban informes técnicos previos negativos, ya que, antes de la compra, "no se tuvieron en cuenta varios informes preliminares de la Armada Argentina que alertaban sobre la necesidad de garantizar determinados repuestos antes de concretar la transacción".
En los documentos se podía ver que "las condiciones en que se ofrecían las aeronaves, no se encontraban en condiciones de volar requiriendo la ejecución de una serie de trabajos para su puesta en funcionamiento", sentenció la Sigen.