El objetivo de la reunión es "repasar las medidas para el agro que tomó el Gobierno de Mauricio Macri desde el 10 de diciembre pasado, y comenzar a plantear una agenda de necesidades hacia adelante, escuchando los pedidos directamente de boca de los dirigentes".
Tras la entrevista con el ministro está prevista la realización de mesas de trabajo con representantes de organismos descentralizados, como el INTA y el SENASA, y con autoridades del Banco Nación.
Pero más allá de ver cómo sigue la generación de políticas para el sector, lo que buscan en Agroindustria es aquietar a algunos dirigentes, quienes manifestaron críticas por diferentes acciones oficiales como la aplicación del régimen de admisión temporaria de soja, las dificultades para la formación de precios del trigo, o la reciente polémica por la suba del precio de la carne.
El mayor desafío para el ministro será "calmar" a la Federación Agraria, de la que su presidente ya anunció ayer que reclamará "políticas diferenciadas" para los pequeños y medianos productores.
"Plantearemos desde nuestra entidad la necesidad de implementar políticas públicas diferenciadas porque estamos muy preocupados por la grave situación que están atravesando los pequeños y medianos productores", adelantó Príncipe.