El presidente electo, Alberto Fernández, fue recibido en la Pastoral Social por el obispo Jorge Lugones y las organizaciones sociales englobadas en el grupo "Los Cayetanos": más allá de las coincidencias en la implementación urgente de un plan nacional contra el hambre, los referentes de la economía social le pidieron al presidente electo un bono de fin de año para los 450 mil beneficiarios de programas sociales.
Fernández fue recibido ayer por la mañana en la sede de la Conferencia Episcopal Argentina por monseñor Lugones, obispo de Lomas de Zamora y titular de la Comisión Episcopal de la Pastoral Social, en un encuentro del que participaron referentes de movimientos sociales, a quienes les detalló cómo será el programa de lucha contra el hambre. "Vine a escucharlos, como un compañero más, preocupado por lo que nos está pasando", sostuvo el presidente electo.
Según fuentes eclesiásticas, durante el encuentro se abordó la difícil problemática alimentaria y la emergencia social que afecta a millones de argentinos y la particular situación de este sector.
"Lo que viene es el gobierno de todos ustedes, no de Alberto y de Cristina, vamos a resolver las cosas juntos", manifestó Fernández, quien pidió "no tener miedo del debate que hay que dar" y aseguró que "la economía popular llegó para quedarse" y que "la gente necesita un horizonte de progreso".
Del encuentro participaron los dirigentes sociales Emilio Pérsico (Movimiento Evita), Esteban Castro y Gildo Onorato (CTEP), Juan Carlos Alderete, Fredy Mariño y Luciano Alvarez (Corriente Clasista y Combativa), Daniel Menéndez, Néstor Moccia y José Oscari (Barrios de Pie), Dina Sánchez (Frente Darío Santillán), Juan Grabois (Movimiento Trabajadores Excluidos), Rafael Klejser (Movimiento Popular La Dignidad) y Natalia Zaracho (Movimiento de Trabajadores Excluidos).
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El presidente electo estuvo acompañado por los dirigentes Gustavo Beliz y Daniel Arroyo. Mientras este último es candidato a ocupar el ministerio de Desarrollo Social, el ex titular de Justicia, podría recalar en un organismo de control.
Al ser consultado por este diario, Alderete dijo que "coincidimos en el país que nos va a dejar el macrismo y lo felicitamos por la actitud que tuvo al condenar el golpe en Bolivia".
También ambas partes coincidieron en el plan de lucha contra el hambre, que contará colaboración de las organizaciones. Hay expectativa en la creación de un Instituto específico para coordinar las acciones de emergencia alimentaria.
"Tendrá a su cargo la ejecución del plan y velar para que no haya chicos desnutridos en las escuelas y los comedores", explicó el dirigente de la CCC, que podría ingresar como diputado si hay "dos corrimientos" de legisladores electos que vayan a integrar el futuro gabinete (por caso, Wado de Pedro iría a Interior)
Aunque las organizaciones prevén nuevos encuentros con Arroyo y Beliz, ayer aprovecharon la cita para hacerle un pedido especial al presidente electo: un bono de fin de año para recomponer los ingresos del salario social complementario (SSC) que hoy ronda los $8 mil.
"Le hicimos una propuesta para que los jóvenes de los programas sociales se tengan que capacitar en industrialización y avances tecnológicos", amplió el dirigente que reconoció que buscarán reformular los programas como "Hacemos Futuro" para que puedan terminar siendo una salida al mercado laboral formal..
Alderete y Lugones le reclamaron al mandatario electo por seguir intensificando los programas para tratar las adicciones de jóvenes y adolescentes en el ámbito de la Sedronar.