Una familia tipo porteña tuvo que desembolsar en enero último $ 25.794 para adquirir la Canasta Básica Total y superar de ese modo la Línea de Pobreza, lo cual representó un incremento de 50,87% respecto de doce meses atrás.
Así lo indican las estadísticas oficiales de la ciudad de Buenos Aires difundidas ayer, que no incluyen el gasto en alquiler de vivienda que requiere el grupo familiar.
Ese mismo hipotético hogar, compuesto por una pareja de 35 años cada uno, propietarios de vivienda y con dos hijos varones de 6 y 9 años, tuvo que abonar $12.721,73 por la Canasta Básica Alimentaria, y situarse así por encima de la Línea de Indigencia.
La Dirección General de Estadística y Censos de la CABA determinó además que el costo de la Canasta Alimentaria (CA) y de la Canasta Total (CT) se ubicó en enero en $13.708 y $ 32.472,2, en forma respectiva, que implicaron aumentos interanuales de 50,74% y 48,53%.
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Esos valores son los que determinan la categoría de “no pobres vulnerables”, es decir, hogares cuyos ingresos mensuales permiten adquirir la Canasta Básica Total, pero no alcanzan para abonar la Canasta Total.
El organismo porteño recordó además que el “sector medio frágil” incluye a los hogares cuyo ingreso total mensual no alcanza a cubrir 1,25 veces la Canasta Total (CT), mientras el sector de “clase media” tiene un ingreso total mensual que se ubica entre 1,25 y menos de 4 veces la CT.
La diferencia entre los valores de inflación y de la canasta básica total se explican porque el último indicador toma únicamente el incremento de los precios correspondientes a alimentos y servicios básicos como gas, luz, agua y transporte, mientras que el índice de precios contempla, además, la variación de precios en otros rubros, como salud, educación, prendas de vestir o esparcimiento.