El encuentro está previsto para las 14 y fuentes parlamentarias indicaron que podría haber dictamen si se producen algunos cambios, según analizaron este martes tras una reunión con especialistas.
Los expositores fueron aportados por el oficialismo y por la oposición y motivaron que los autores del proyecto, impulsado por el Frente de Todos (FdT), admitan la posibilidad de incluir modificaciones. Así lo afirmaron la senadora por la provincia de Buenos Aires, Juliana Di Tullio, y su compañero de bancada, el neuquino Oscar Parrilli.
La senadora bonaerense reveló que la intención del proyecto, que apunta a cobrar una tasa sobre los bienes fugados al exterior, es que "no sea una excusa para el blanqueo de dinero por la comisión de delitos aberrantes".
En el mismo sentido se expresó Parrilli, quien enumeró una serie de cambios al texto que podría ser dictaminado.
"Vamos a aclarar en el texto expresamente que la única actividad ilícita que exime la ley es en la cuestión penal tributaria y de evasión fiscal. Siguen afuera (sin eximición) el lavado de dinero, el narcotráfico, la trata de personas, el contrabando, el terrorismo y demás", enumeró.
Añadió que el colaborador debe "dar información que sea veraz, confiable, contundente y sincera" y que no irá a la AFIP a hacer la denuncia, sino al Ministerio de Justicia, que creará una oficina especial.
Advirtió que la información falsa brindada por un colaborador será considerada delito; que el monto mínimo a denunciar es de 500.000 dólares y que se exime de ser denunciantes a abogados, escribanos y contadores.
La participación de los legisladores del Frente de Todos se produjo cuando expuso Jimena de la Torre, abogada especialista en impuestos y política fiscal, exasesora en el Ministerio de Hacienda en la redacción de la Ley de Sinceramiento Fiscal y recientemente elegida para integrar el Consejo de la Magistratura.
"Esto es un impuesto porque tiene una base imponible, un sujeto pasivo y un sujeto activo. No tiene importancia el nombre que le pongan", explicó De la Torre.
En rechazo a parte del proyecto expresó que "lo más preocupante es que estamos convirtiendo al Estado Nacional en un vehículo para el lavado de activos. El origen de los fondos es fundamental. Este proyecto dice que no lo vamos a revisar", destacó De la Torre.