La ministra de Desarrollo Social consideró que "cuando se niegan estos números, claramente no se trabaja de la misma manera que reconociéndolos". En declaraciones a Radio Nacional, la funcionaria consideró por otra parte que "además de los ingresos" se debe "trabajar" sobre "otras vulnerabilidades de las familias".
"Trabajamos con la emergencia sin dejar de lado el mediano y largo plazo", indicó Stanley, quien evaluó que "en Argentina la pobreza estructural viene desde hace muchos años".
Para avanzar en una reducción de la pobreza, sostuvo que "es importante la generación de empleo de calidad" y consideró que "la política social no es especulativa ni puede tener banderas políticas".
"El número del INDEC causa dolor pero está dentro de lo que esperábamos", puntualizó la funcionaria, quien evaluó: "Es una realidad que estamos decididos a cambiar".
LEA MÁS:
Por su parte, el titular del INDEC, Jorge Todesca, señaló que "este indicador, más allá de las cifras que impactan da un mapa importante de la Argentina".
"No haber tenido un índice como este es la consecuencia de la voluntad de no atender el problema. Vaya uno a saber cómo se hicieron los relevamientos, los planes sociales carecían de guía", dijo Todesca.
Además, el funcionario aseguró en declaraciones a AM 950 que "la anterior gestión quedó envuelta en sus propias mentiras, hasta dejar de publicar información porque ya no se sostenía". "Es un orgullo que el presidente tome los índices del INDEC como un patrón de medida para accionar", agregó.
Y remarcó: "Es indudable que esta masa de pobres e indigentes no se creó en estos meses", En ese sentido, mencionó que desde 2013 que no se difundían datos de pobreza, desde que "se anunció aquella que era del 4%, que no sé cómo calificarla, ridículamente baja", dijo.
Explicó además que "la canasta básica alimentaria vale 4.930 pesos", por lo que "todo aquel hogar con ingreso menor a 4.930 pesos además de ser pobre es indigente, y todo hogar por debajo de los 12.800 pesos es pobre".
Para el titular del Indec, "hay personas que están en condiciones sociales donde nunca les llegará el empleo", y advirtió: "Tenemos un mercado de trabajo muy débil en el noreste argentino, y ahí mismo tenemos un 40,5 de incidencia en la pobreza".