En el marco de la última jornada de exposiciones sobre el proyecto de legalización del aborto, varias referentes se manifestaron a favor y en contra de la iniciativa en el Senado que se votará el 8 de agosto próximo.
Entre los discursos más fuertes se encontraba el de Mariana Hellin, abogada pro aborto, y la psicóloga Carolina de la Fuente. Para la primera, es necesario cambiar el sistema de causales “para que el aborto, que de todas maneras nos vamos a practicar, no sea en la clandestinidad”.
"Las mujeres hemos aprendido a poner nuestros temas en agenda y sostenerlos a fuerza de sortear diferencias políticas. Pudimos hacer del feminismo una construcción horizontal, heterogénea y popular", explicó.
En tanto, De la Fuente subrayó que para abortar “la mujer necesita desconectarse del vínculo con ese hijo y deshumanizarlo: verlo como coágulos o un conjunto de células y tejidos porque sino no podría abortar".
"El Estado no puede negar la realidad de la existencia de un hijo en cada embarazo, de lo contrario en vez de ayudar a la mujer a superar la crisis del embarazo no deseado reforzará la deshumanización", agrega De la Fuente.
También fue de la partida la escritora Claudia Piñeiro quien sopesó: “En un extremo tenemos una ley que no les gusta, pero que podemos mejorar, y en el otro un rechazo absoluto que deja a las mujeres libradas a su suerte y a la ilegalidad".
La diputada nacional por la provincia de Buenos Aires, Margarita Stolbizer, se manifestó a favor de la legalización de la interrupción del embarazo. “El aborto forma parte de nuestra realidad cotidiana y es fundamental abordarlo con seriedad y madurez, y no por creencias personales muy respetables pero que son estrictamente individuales”, afirmó.
"La maternidad no puede ser forzada ni impuesta. Las mujeres no somos incubadoras, somos personas con derechos que reclamamos en condiciones de igualdad", sostuvo la legisladora.
Pero no fueran las únicas. Para la doctora Marisa Labovsky, “en los años 90 recibíamos a mujeres que se ponían pastillas de permanganato de potasio que les quemaban la vagina, también estábamos acostumbrados a sacar perejil de las pacientes que cualquier cosa hacían para poder terminar con su embarazo”
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Por su parte, Guadalupe Batallán, egresada del Colegio Nacional de Buenos Aires, sentó su postura contra la iniciativa. “Este proyecto de ley destruye los principios éticos más importantes de la humanidad e instaura el derecho a matar”, sostuvo.
“El aborto no resuelve la pobreza, ni será liberador poner a una mujer ante la cruenta decisión de ser madre de un hijo vivo o de un hijo muerte”, afirmó.
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