Avanza una investigación por comercialización de material pornográfico y abuso infantil. Los policías sacaron fotos y videos y secuestraron los carnets de los asistentes.
En el marco de una investigación por comercialización de material pornográfico y abuso infantil, agentes policiales de Quilmes allanaron un club de barrio en Don Bosco y buscan intensamente al profesor de la escuelita de fútbol, quien se encuentra prófugo, acusado de ser el responsable de los graves vejámenes, en tanto que los investigadores intentan saber si las violaciones se dieron dentro del establecimiento y si hay más implicados.
Se trata de una causa aberrante que hace salir a la luz el calvario por el cual muchos menores de edad estaban atravesando. Cabe destacar que el sujeto al cual apunta la Justicia era quien les daba clases a los pequeños de entre 11 y 15 años y no descartan que haya más abusadores sueltos que aún no fueron identificados. Lo cierto es que hay conmoción en el barrio por parte de las familias que habían depositado total confianza en el círculo del lugar.
Todo comenzó con un allanamiento en manos de la División de Delitos Informáticos (Cibercrimen) de Quilmes, por una orden del Juzgado de Garantías número 2, que trabajó en conjunto con la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio (UFIyJ) número 8 de Berazategui, en manos del fiscal Daniel Ichazo, especializado en delitos sexuales contra menores de edad. Así es que se dirigieron al Club Veteranos de Malvinas, situado en la calle Julio Cortázar entre Pampa y Pilcomayo.
Una vez adentro, los agentes cotejaron si el interior de la propiedad, en la cual hay ocho habitaciones que se alquilan, coincidía con los videos en los cuales se observaban los abusos contra los niños. Además, sacaron fotos y videos y secuestraron los carnets de los asistentes, como así también documentación relevante para la causa para obtener más información y llegar hasta los implicados.
Es importante resaltar que si bien no hubo detenidos, identificaron a quienes viven allí y le pasaron sus datos a las autoridades judiciales para que inicien un seguimiento de manera inmediata.
Por su parte, buscan al entrenador de las categorías 2010, 2011 y 2012, quien se mantiene prófugo y es apuntado por comercializar todo el material pornográfico infantil y ser el perpetrador de los terribles vejámenes. La causa fue caratulada “Producción, comercialización de representaciones de menores de 18 años dedicados a actividades sexuales”.
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