Tras la derrota ante Gimnasia en Jujuy quedó en zona de descenso. El atacante Gonzalo Flores sostuvo que “es un mal momento y depende solo de nosotros”.
Almirante Brown siempre toca fondo, pero suena como que nunca se sabe cuál es el fondo, o hasta dónde llega. Con 7 puntos -lo mismo que Defensores Unidos de Zárate- está en zona de descenso (los dos últimos de cada zona perderán la categoría), y sólo Talleres de Remedios de Escalada asoma detrás.
A pesar del cambió de timón, no logra que la maquinaria se encienda, que engrane, que empiece a funcionar. Siempre se espera que la próxima sea la del despegue y esta no será la excepción, ya que Almirante será local en el Fragata Presidente Sarmiento frente a Agropecuario, en el marco de la duodécima fecha de la Zona B de la Primera Nacional. Será el domingo a las 15 en Casanova con el arbitraje de Julio Barraza.
La derrota en Jujuy ante Gimnasia por 1-0 hunde al Mirasol en el sótano de las posiciones y esto no hizo otra cosa que producir más efectos negativos sobre la realidad deportiva. Por caso, en una decena de fechas. Almirante Brown apenas pudo ganar un partido.
Ante Gimnasia de Mendoza se le escapó una victoria en el último minuto de juego y luego en el norte le sucedió algo parecido. Es que todo apuntaba a que era un empate ante el Lobo jujeño, pero no alcanzó el esfuerzo del equipo de Guillermo Szeszurak. Es que la falta de juego incidió en sus chances ofensivas.
Ante esta realidad irrefutable, sólo se impone una fuerte autocrítica para buscar el error. En ese sentido, Gonzalo Flores fue claro y contundente: “Es un mal momento y depende solo de nosotros” y se entusiasmó: “Vamos a salir adelante”.
Asimismo, el Matador entendió que “si bien es un mal momento, también es cierto que falta bastante. Creo en el plantel y en el cuerpo técnico”. Y de cara al cruce con Agropecuario afirmó: “Vamos a intentar darle una alegría a la gente. Lo más importante es que no se pierdan puntos de local”.
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