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El DT se alejó del Celeste de Turdera por la delicada situación deportiva. Un equipo plagado de figuras busca un reemplazo urgente para recuperar la ilusión de animar el torneo.
Es oficial: Aníbal Biggeri ya no es el entrenador de Temperley. La decisión se tomó de mutuo acuerdo tras la derrota ante Gimnasia de Jujuy en el norte, resultado que dejó al Gasolero en una situación inesperada en la tabla de posiciones. Con apenas dos victorias, un empate y cuatro derrotas , el ciclo de Biggeri terminó abruptamente, marcado por una seguidilla de tres caídas consecutivas y un nivel futbolístico que no estuvo a la altura de las expectativas.
El mal momento del equipo, sumado a su cercanía con la zona de promoción (a solo dos puntos ), precipitó la salida del técnico. Más allá de los resultados, el rendimiento global del plantel fue duramente cuestionado, especialmente por la falta de adaptación de los refuerzos de renombre y la dependencia excesiva de uno o dos jugadores dentro de un equipo plagado de figuras.
En su segundo ciclo como DT del Celeste, Biggeri logró apenas siete puntos en siete partidos, con un magro desempeño como visitante: solo pudo sumar una unidad fuera de casa . Este panorama preocupante llevó a la dirigencia a tomar una decisión drástica para intentar revertir la complicada situación deportiva.
La búsqueda de un nuevo entrenador ya comenzó, y hay dos nombres que suenan con fuerza para ocupar el banco del Gasolero. El primero es Gustavo Coleoni , quien se encuentra libre tras su exitoso paso por San Miguel , donde logró consolidar un estilo de juego efectivo y competitivo.
El segundo nombre que aparece en escena es el de un viejo conocido: Alejandro Orfila, quien dirigió al Gasolero en 2023 con buenos números. Su experiencia previa en el club y su conocimiento del plantel lo posicionan como una opción sólida para liderar al equipo en este momento crítico.
La elección del nuevo DT será confirmada en los próximos días, mientras el plantel intenta recuperarse anímicamente para enfrentar los compromisos venideros.
Con el descenso acechando, Temperley necesita urgentemente reencontrar la regularidad y el funcionamiento colectivo que lo caracterizó en otras temporadas. La llegada de un nuevo entrenador será clave para intentar revertir esta situación y evitar un desenlace dramático en la temporada.
Los hinchas esperan respuestas rápidas y efectivas, conscientes de que cada punto será vital para alejarse de los puestos de descenso. El futuro inmediato del Celeste dependerá, en gran medida, de la capacidad del próximo técnico para reconstruir al equipo y devolverle la confianza perdida.
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