Más de tres mil ejemplares de distintas especies, entre las que se encuentran tucanes, variedades de lechuzas, cardenales, jilgueros, cotorras, tortugas, serpientes y hasta armadillos, fueron recapturados por la Justicia en una investigación por tráfico de animales protegidos o en peligro de extinción.
Los allanamientos incluyeron viviendas de Morón, La Tablada, Moreno, Isidro Casanova, Merlo y Lomas del Mirador. La investigación se inició por una cuenta de Facebook en la que se anunciaban que vendían aves y a partir de entonces descubrieron la red que se dedicaba a cazar estas especies y comercializarlas.
El Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional N° 2 de Morón, a cargo del juez federal Jorge Rodríguez, y la secretaria Constanza Pagani, realizó una investigación que tardó nueve meses en dar sus frutos y así se produjeron los allanamientos de 35 domicilios. Las requisas incluyeron las zonas Norte y Sur, y varias ciudades del Interior como Salta, Santiago del Estero, Termas de Río Hondo, La Banda, Monteros y Gualeguaychú. En total detuvieron a 28 personas por participar como proveedores, cazadores, distribuidores, transportistas o vendedores, para una banda que se dedicaba al tráfico de animales.
Pero también en los allanamientos secuestraron 350 elementos de caza -como trampas y redes-, 23 armas de fuego -escopetas, rifles, revólveres, pistolones, carabinas-, dinero en efectivo -$870.000 y U$S1.365- y seis vehículos. Los animales fueron entregados a Fauna y Flora de cada una de las provincias. “Las especies que se encontraban en condiciones de ser liberadas fueron soltadas en su respectivo hábitat, mientras otras están en un proceso de cuarentena”, afirmaron desde la Secretaría del Juzgado.
Un delito que no es nuevo y mucho menos en la zona oeste del Gran Buenos Aires. Hace cuatro meses, gracias a la denuncia de un grupo de vecinos, la Justicia rescató a 60 animales, algunos de ellos en peligro de extinción: Urracas, tordos, reinas mora y conejos que en su momento fueron trasladados al parque temático Temaikén y luego liberadas.