Con poco juego y aprovechando la comodidad del rival, el Taladro logró un empate que alivia pero no disimula sus problemas. Los goles fueron obra de Eduardo Salvio, de penal, y Gerónimo Rivera.
Con poco y nada de juego, pero con más vergüenza deportiva que otra cosa, Banfield aprovechó que Lanús se sentía cómodo con la ventaja y no fue por más, llevándose un punto que al menos le permite trabajar algo más liviano, aunque sigue en deuda. El Clásico del Sur terminó 1 a 1, con goles de Eduardo Salvio , de penal, para el Granate, y Gerónimo Rivera para el Taladro.
El equipo de Mauricio Pellegrino justificó ampliamente la ventaja con la que se fue al entretiempo. Mejor plantado en el campo de juego, con mayor ambición que su rival y gracias al peso de sus individualidades, Lanús dominó las acciones durante gran parte del partido. La contracara fue Banfield, previsible en sus movimientos, tibio en ataque y alarmantemente falto de ideas para generar situaciones claras de gol.
Los primeros minutos en La Fortaleza fueron de estudio, hasta que el Granate comenzó a soltarse. Sasha Marcich mostró decisión por su banda, mientras que Marcelino Moreno desequilibraba con su gambeta, una constante en el andamiaje del equipo de Pellegrino .
La presión del dueño de casa dio sus frutos antes del cierre de la primera mitad. Llegó el córner ejecutado por Marcelino Moreno , un agarrón de Martín Río sobre Ezequiel Muñoz y la falta sancionada por el árbitro Nicolás Ramírez . Del penal se hizo cargo Eduardo Salvio , quien con un remate al medio del arco puso el 1 a 0 y marcó la diferencia en el partido.
El equipo de Broggi quedó en un problema grande, ya que no mostró respuestas anímicas para meterse rápidamente en el partido e ir en busca de algo más. Lanús pudo aumentar las cifras con una jugada individual de Marcelino Moreno , quien dejó por el piso a un rival, pero el remate posterior de Sasha Marcich fue contenido por Sanguinetti, quien adivinó la intención y evitó el segundo tanto.
El destino del Taladro siempre parece pasar por las pelotas paradas. En el descuento, llegó una chance clara con un tiro libre ejecutado por Gabriel Vega al segundo palo, pero Santiago López García falló increíblemente frente al arco vacío. Sin embargo, Gerónimo Rivera apareció en el complemento para igualar el marcador y darle algo de alivio al equipo de Banfield.
Con este empate, el Taladro suma un punto que lo deja en deuda futbolística, pero que al menos le permite volver a trabajar con algo más de tranquilidad. Por su parte, Lanús mostró jerarquía y control, pero pagó caro su falta de ambición para liquidar el partido cuando tuvo la oportunidad.
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