Se originó tras el enfrentamiento entre dos alumnos y se utilizaron piedras y palos con terminaron dañando varios vehículos. Intervino la policía, que logró calmar la situación.
Una feroz pelea entre dos estudiantes de una escuela secundaria de Florencio Varela culminó con la intervención de las fuerzas policiales, luego de que un joven del turno tarde haya ido a enfrentarse con uno de la mañana, generando una trifulca que siguió con una batalla campal en las afueras del establecimiento en la cual dañaron vehículos, mientras que gran parte de los responsables de los otros alumnos decidieron sacarlos de clases por temor a una posible venganza que los involucrados mencionaron.
La realidad educativa viene atravesando un momento muy complejo respecto al interés y la función que le dan los propios jóvenes. Lo cierto es que sumado a ello, el nivel de violencia en las calles y en las instituciones es altísimo y la preocupación de las autoridades no se hace esperar, aunque las soluciones no parecen llegar. En dicha oportunidad, apenas semanas después de que en el distrito una chica de 16 años acudió con un revólver y más de 100 municiones, sucede lo mencionado y hay temor en el ambiente.
Todo comenzó en la Escuela Secundaria 10 del barrio Pico de Oro, situada en la calle 629 entre Pisani y Viena, en la mañana del miércoles. La secuencia quedó registrada en el lente de un celular de uno de los testigos y en las imágenes se puede ver cómo un muchacho de la tarde acudió en el cambio de turno para toparse con otro adolescente con el cual había rispideces.
Como si fuese una película de acción y al estar las puertas cerradas, se trepó por la reja y saltó al interior, para luego correr a su “contrincante” y trenzarse a golpes. Pero nada quedó allí, los grupos de amigos se metieron hasta salir del establecimiento y todo se convirtió en una batalla campal feroz en la que se revolearon piedras, botellas y cuanto elemento se les cruzara por el camino. De hecho, dañaron vehículos de los vecinos que viven a los alrededores y nada les importó.
Para culminar el ataque tuvo que intervenir la Policía de Varela, que llegó para calmar las aguas y enviar a los alumnos a sus viviendas. Pero para dicha instancia, la comunidad ya estaba enterada de lo que había ocurrido y muchos padres fueron a sacar a sus hijos de las clases debido a que empezó a correrse el rumor de que iba a existir una posible venganza por parte del agredido del turno mañana.
Los directivos de la escuela enviaron un mensaje de audio a las familias indicando que podían retirar a los alumnos en caso de tener miedo, y que iban a ser comprensivos con la situación.
Las autoridades se mostraron preocupadas por esta pelea y muchos varelenses allegados a la institución se manifestaron públicamente y algunos sostuvieron que “es una vergüenza que estos pibes se vayan a matar como si nada”.
Es importante resaltar que, a pesar de los golpes, no fue necesaria la presencia de profesionales médicos ya que no hubo heridos, algo positivo entre tanta violencia.
comentar