Cansada por los incumplimientos, la nueva conducción del Gasolero inició acciones legales contra la empresa encargada del desarrollo del espacio adquirido para las divisiones inferiores.
Más allá de lo que pasa dentro del campo de juego, en Temperley las cosas comenzaron a moverse desde el cambio de gestión. La conducción que comanda Alberto Lecchi, que ya había dado avisos a la empresa desarrolladora a cargo del proyecto en el Predio de Guernica, decidió no esperar más e inició acciones legales contra Grupo de Gestión Comercial SRL, y contra sus propietarios.
Luego de su adquisición, el predio comenzó a ser un bien más declarativo que un proyecto. Al asumir la nueva dirigencia, se encontró con un sinfín de irregularidades puertas adentro del club, y el terreno de Guernica no era la excepción. Desde una venta que no figuraba en ningún papel, hasta obras que no comenzaron nunca, la CD actual fue acumulando argumentos y ahora actuó judicialmente.
"A partir del incumplimiento de los contratos civiles y comerciales firmados entre las partes el día 18 de febrero pasado, y el no pago de las deudas contraídas en la operación de compraventa de los lotes que el Club Atlético Temperley posee en la localidad de Guernica, la conducción del club inició acciones judiciales contra la empresa GGC (Grupo de Gestión Comercial SRL) y sus responsables Andrés Bruno Pardi y Diego Ariel López", denuncia el comunicado institucional del Gasolero.
Además, en el mismo informaron que "en el ámbito interno, se girarán todos los documentos que tiene la actual Comisión Directiva al recientemente creado Tribunal de Disciplina para que evalúe responsabilidades que pudieran corresponder a anteriores dirigentes del club".
Según consignan, se reclama "deuda impaga vencida en efectivo por 30.000 dólares, más penalidades e intereses que al día de la fecha más que duplican esa cifra", a lo que se suman "300.000 dólares por impagos al no haberse cumplido con los plazos determinados para el reinicio y avance de las obras".
La denuncia presentada se encuentra en el Juzgado de Primera Instancia en lo Civil y Comercial número 11 de los Tribunales de Lomas de Zamora, donde se ha designado a la doctora María Florencia Rojas para la mediación inicial.
Por otra parte, el club dará este domingo un paso adelante en materia de inclusión y se sumará a una experiencia que recién está comenzando: el Powerchair Football. El fútbol en silla de ruedas motorizadases una herramienta para integrar a personas con discapacidades motrices a la práctica deportiva y promover su inclusión social, basando en la generación de nuevos vínculos y amistades.
Esta disciplina es un deporte en equipo para las personas con discapacidad que utilizan sillas de ruedas eléctricas. Se juega en un gimnasio o en una cancha de baloncesto estándar. Dos equipos de cuatro jugadores cada uno usan su silla equipada con protecciones metálicas para atacar, defender, y golpear una de pelota de fútbol de 330 mm de diámetro, intentando marcar goles.